2021 fue un año turbulento en Argelia, Libia y Túnez

Túnez, 27 dic (EFE).- La región del norte de África ha vivido un turbulento año que en la escena política ha dejado a Libia sin las esperadas elecciones presidenciales tras una década de guerra civil, a Túnez al frente de un presidente que acumula plenos poderes y a Argelia ante un movimiento de protestas sociales contra el régimen militar que ha sido ahogado por la represión policial.

Estas son las principales noticias que marcaron este 2021 en la región:

EL PRESIDENTE TUNECINO SE ARROGA PLENOS PODERES

El pasado 25 de julio, el presidente de Túnez, Kais Said, en el poder desde finales de 2019, cesó al primer Ministro, Hichem Mechichi; suspendió el Parlamento de manera indefinida, así como ó la casi totalidad de la Constitución y se hizo con plenos poderes con el fin de "recuperar la paz social".

Aunque la mayoría de partidos políticos denuncian un "golpe de Estado" y la comunidad internacional pide un regreso a la "vía democrática", el mandatario ha anunciado su hoja de ruta para el próximo año: una consulta popular en julio con el fin de reformar la Constitución y elecciones legislativas anticipadas el 17 de diciembre de 2022.

LIBIA POSPONE LAS ELECCIONES PRESIDENCIALES

Fijadas dentro del plan de reconciliación nacional impulsado por Naciones Unidas, las elecciones presidenciales previstas este 24 de diciembre fueron suspendidas apenas 48 horas antes del escrutinio debido al conflicto entre el poder político y el poder judicial sobre la designación del centenar de candidatos.

La Alta Comisión Electoral propone que se celebren un mes más tarde, junto a los comicios legislativos, para poder redactar una base constitucional y evitar el caos y la guerra civil en las que está inmerso el país desde que en 2011 fue derrocado el dictador Muamar el Gadafi.

EL "HIRAK" ARGELINO AHOGADO POR LA REPRESIÓN POLICIAL

El "Hirak" (movimiento de protestas populares), que arrancó a principios de 2019 para forzar la renuncia del entonces presidente, Abdelaziz Buteflika, y más tarde exigir el fin del régimen militar, ha terminado ahogado dos años más tarde por la represión policial, no sólo en las calles sino también en las redes sociales.

La justicia continua enjuiciando a periodistas, militantes y activistas por los derechos humanos y, según el Comité Nacional para la Liberación de los Detenidos, cerca de 253 personas se encuentran en prisión por su participación en las manifestaciones o la defensa de las libertades individuales.

TÚNEZ REGRESA A LA MESA DE NEGOCIACIONES CON EL FMI

Para hacer frente a una deuda pública de más de 30.000 millones de euros, el equivalente al 100% de su PIB, el gobierno tunecino regresa a la mesa de negociaciones para cerrar un nuevo crédito- el cuarto de esta última década- con el Fondo Monetario Internacional (FMI).

La poderosa central sindical tunecina UGTT,ya ha anunciado que no apoyará más medidas "dolorosas" y ha revelado parte del contenido de su programa financiero, que incluye reducir el 10% del sueldo de los funcionarios, su congelación salarial durante los próximos cinco años, la privatización de empresas del sector público y la retirada de las subvenciones a los productos de primera necesidad.

LA MIGRACIÓN SE DISPARA ANTE LA INSEGURIDAD EN LIBIA

Según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), más de 1.500 personas migrantes han fallecido durante este año en la ruta central del Mediterráneo- considerada la más mortífera del mundo- mientras que otras 30.000 han sido interceptadas o rescatadas y devueltas a Libia a pesar a ser considerado un país "no seguro" por las organizaciones humanitarias.

En el vecino Túnez, 15.000 de sus ciudadanos alcanzaron la costa italiana, frente a 12.500 que lo hicieron el año anterior, y 20.000 personas de origen subsahariano- principalmente de Somalia, Costa de Marfil, Sudán y Eritrea- llegaron al país magrebí, convertido en un lugar de tránsito para quienes huyen de la violencia de las mafias y las autoridades libias.

CENTENAR DE INCENDIOS "CRIMINALES" ARRASAN EL NORTE DE ARGELIA

Un centenar de incendios forestales asolaron el pasado mes de agosto la región montañosa de la Cabilia, en el noreste de Argelia, que arrasaron más de 62.000 hectáreas y terminaron con la vida de 73 personas, 33 de ellas militares que participaban en las operaciones de rescate.

Pese de la ausencia de políticas de prevención y la falta de aviones cisterna que provocan cada verano numerosos siniestros, el presidente Abdelmedjid Tebboune acusó al Movimiento por la Autodeterminación de Cabilia (MAK) y al movimiento islamista Rachad- clasificados meses antes como "organizaciones terroristas"- de ser los autores de estos "incendios criminales".

EL PODER JUDICIAL TUNECINO EN EL PUNTO DE MIRA

Tras decretar el Estado de excepción, el mandatario tunecino ha criticado en numerosas ocasiones la lentitud de la justicia e incluso su falta de imparcialidad y ha expresado su intención de reformar el Consejo Superior de Magistratura, una iniciativa que ha sido considerada por la instancia jurídica como una injerencia.

Las organizaciones por los derechos humanos denuncian en los últimos meses juicios militares a civiles y la adopción de medidas cautelares - arrestos domiciliarios y prohibición de abandonar el país- contra altos cargos de instituciones, magistrados, empresarios y diputados por supuestos casos de corrupción y otros ligados a libertad de expresión.

ORGANIZACIONES SOCIALES TEMEN UNA "EXPLOSIÓN SOCIAL" EN TÚNEZ

Con un precario sistema de sanidad público y medios limitados, Túnez ha logrado capear la crisis sanitaria y vacunar al completo a 5,6 millones de ciudadanos de una población de 12 millones gracias a la ayuda de la comunidad internacional, que desde el pasado mes de julio ha donado más de siete millones de dosis así como material médico.

Sin embargo, la pandemia de la COVID-19 ha asestado un duro golpe al sector turístico- que representa el 14% de su economía nacional- y a las clases sociales con menos recursos y que viven con lo que ganan al día. Ante la mayoría de indicadores económicos en rojo, con un desempleo del 18% y una inflación que supera el 6%, la UGTT advierte de una inminente "explosión social".

EL TENIS FEMENINO MÁS POPULAR QUE NUNCA

La tenista tunecina Ons Jabeur, de 27 años, se convirtió el pasado mes de julio en la primera mujer árabe en llegar a los cuartos de final en Wimbledon y actualmente ocupa el décimo puesto del escalafón de la Women's Tennis Association (WTA).

Para apoyar a las autoridades en la lucha contra la pandemia, la deportista vendió en una subasta benéfica su raqueta, con la que derrotó a la estadounidense Venus Williams, cinco veces campeona en Wimbledon; a la española Garbiñe Muguruza, vencedora de este torneo en 2017, y a la polaca Iga Swiatek, ganadora de la pasada edición de Roland Garros. La pieza alcanzó un precio final de 23.000 euros en poco más de 24 horas.

ARGELIA SE HACE POR PRIMERA VEZ CON LA COPA ÁRABE

Tras varios años de sequía, la selección de fútbol tunecina, las "Águilas de Cartago", se calificó de manera inesperada para la final de la Copa Árabe, celebrada a mediados de diciembre en Qatar, tras vencer a Mauritania (5-1), Emiratos Árabes (1-0) y perder frente a Siria (0-2).

En un encuentro 100% norteafricano, los "zorros verdes del desierto"- llegados desde Argelia- lograron imponerse con un contundente 2-0, dejando a su contrincante a las puertas de reeditar el título logrado en 1963, fecha en la que se fundó este torneo menor que la FIFA decidió organizar como banco de pruebas para el Mundial de 2022. EFE

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