Cantabria pierde 4.700 empleos femeninos en la pandemia pero suma masculinos

Santander, 31 ene (EFE).- El empleo femenino ha caído un 4,1 por ciento en los dos años de pandemia en Cantabria, que cerró 2021 con 4.721 mujeres ocupada menos que en 2019 mientras que el masculino ha aumentado casi un 2 por ciento en ese mismo periodo, con 2.292 ocupados más, según un informe de UGT.

Santander, 31 ene (EFE).- El empleo femenino ha caído un 4,1 por ciento en los dos años de pandemia en Cantabria, que cerró 2021 con 4.721 mujeres ocupada menos que en 2019 mientras que el masculino ha aumentado casi un 2 por ciento en ese mismo periodo, con 2.292 ocupados más, según un informe de UGT.

Cantabria ha sido la región en la que más ha bajado el número de mujeres ocupadas en esos dos años, un descenso que atribuye a la brusca caída de las trabajadoras temporales en la hostelería y el hogar, destaca el sindicato.

En su informe, elaborado con datos de la Encuesta de Población Activa (EPA), señala que Cantabria registró al término del año pasado 242.245 empleos, casi un 1 % menos que en 2019, justo antes de la irrupción de la pandemia, aunque está pérdida responde exclusivamente a los femeninos.

En el conjunto de España, sin embargo, el empleo femenino ha aumentado incluso más que el masculino, un 2,1 por ciento frente a un 0,2 .

Solo ha bajado en seis autonomías, con Cantabria a la cabeza y a la que se suman Baleares (-2,4 %), Asturias (-1,2 %), Castilla y León (-0,6 %), Galicia (-0,4 %) y La Rioja (-0,1 %).

Según la secretaria de la Mujer de UGT en Cantabria, Pilar Santamaría, "no es algo novedoso que cuando surge una crisis el empleo más temporal y precario, que aparece y desaparece con la misma facilidad, sea el primero en caer porque para las empresas es más fácil desprenderse de él".

El 90 por ciento de los empleos femeninos que se han perdido en estos dos años eran temporales y un 97 % con jornada parcial.

"Es evidente que en Cantabria este empleo precario y de corta duración corresponde en su gran mayoría a las mujeres y a los jóvenes", señala Santamaría, quien destaca que ya hay sectores, como la hostelería, con una pérdida notable de empleo femenino que contrasta con una recuperación del masculino, lo que confirma, a su juicio, que "la calidad del empleo no es la misma en los dos sexos".

Además advierte de que esta pérdida de empleo temporal de las mujeres no implica una mejora del indefinido porque de hecho hay menos asalariadas con un contrato de este tipo en Cantabria que en 2019, mientras que en los hombres se ha incrementado un 4 por ciento.

Según el secretario de Empleo del sindicato, Julio Ibáñez, Cantabria cerró 2021 con 156.497 asalariados con un contrato indefinido, la mayor cifra de los últimos 10 años.

Lo achaca en gran medida "a los últimos acuerdos alcanzados en el diálogo social para fomentar el empleo estable y a la labor de la Inspección de Trabajo para detectar contratos temporales en fraude de ley y convertirlos en indefinidos".

El informe de UGT recoge que la mayor parte del empleo femenino que se ha destruido en Cantabria en estos dos años de pandemia corresponde a la hostelería (-4.702 ocupadas menos) y las empleadas del hogar (-3.250).

Otro de los sectores que ya presenta un significativo balance de empleo negativo en las mujeres si se compara con 2019 es el de las actividades sanitarias y servicios sociales.

Así, al término de 2021 la EPA registraba en Cantabria 20.344 ocupadas en la sanidad y los servicios sociales, 812 menos que en 2019 (-3,8%); descenso que no se produce en los hombres, donde hay medio millar más de trabajadores.

UGT aclara, no obstante, que en el primer año de pandemia en 2020, en Cantabria se registró un aumento de más de 3.000 mujeres ocupadas en la sanidad y servicios sociales y se superaron por primera vez los 24.000 empleos femeninos en este sector. EFE

lcj