Derecha italiana debatirá el viernes del próximo presidente de la República

Roma, 12 ene (EFE).- El líder del partido conservador Forza Italia, Silvio Berlusconi, y los de los ultraderechistas Liga y Hermanos de Italia, Matteo Salvini y Giorgia Meloni, respectivamente, debatirán el viernes sobre el posible candidato a votar conjuntamente para la Presidencia de la República.

El mandato del actual jefe del Estado, Sergio Mattarella, concluye el próximo febrero y los partidos deben elegir un sustituto, pues este ha insistido en que no quiere repetir en un segundo septenio.

La carrera a la Presidencia comenzará el 24 de enero con una primera votación en el Parlamento y entre los nombres que más han sonado hasta ahora se encuentran los del primer ministro italiano, Mario Draghi, y el de Berlusconi.

La elección de Draghi pone en una encrucijada a los partidos porque tendrían que elegir a otro primer ministro si quieren continuar la legislatura hasta 2023 y no convocar elecciones generales anticipadas.

Por su parte, la candidatura de Berlusconi es la única para los miembros de su partido, Forza Italia, pero puede no aunar los consensos parlamentarios suficientes, especialmente por parte de la formación progresista Partido Demócrata (PD) y el Movimiento 5 Estrellas.

Berlusconi, Salvini y Meloni se ruenirán en Roma el viernes para abordar la situación y la necesidad de que la coalición se presente unida.

"La unidad de la coalición siempre ha sido un valor a preservar. No podemos desperdiciar esta oportunidad de expresar nuestra opinión", dijo el líder de Forza Italia a los medios.

El tres veces primer ministro de Italia ha dejado entrever en los últimos días que su formación no seguiría en el Gobierno si Draghi es nombrado presidente de la República y hay que designar a otro para que ocupe su cargo actual.

Sin embargo, Salvini se desmarcó este miércoles y garantizó que la Liga no saldrá del Gobierno aunque se dé este escenario.

"Espero que el primer ministro siga siendo Draghi, que sigamos trabajando con él", dijo, pero "la Liga seguirá en el Ejecutivo independientemente de quién esté como jefe de Gobierno".

Riccardo Molinari, también miembro de la Liga, subrayó que es necesario entender claramente si "Berlusconi quiere salir realmente al campo", pero también apostó por "preparar un plan B, encontrar otra figura, que pueda ser apoyada por los partidos de la izquierda", en caso de que su respaldo sea necesario.

Enrico Borghi, del PD, rechazó la candidatura de Berlusconi porque "sería el final del actual Gobierno" por las divisiones que generaría, y defendió "encontrar una figura de consenso".

Los partidos están sondeando sus alianzas y está previsto que el jueves se reúnan los diputados y senadores del M5S para hacer balance de la situación. EFE

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