Tres detenidos en protestas de antivacunas ante el Parlamento en N. Zelanda

Sídney (Australia), 9 feb (EFE).- Tres manifestantes han sido detenidos este miércoles durante las protestas ante el Parlamento neozelandés contra la obligatoriedad de las vacunas en el país, un día después de que decenas de ellos acampara en las inmediaciones del legislativo.

Sídney (Australia), 9 feb (EFE).- Tres manifestantes han sido detenidos este miércoles durante las protestas ante el Parlamento neozelandés contra la obligatoriedad de las vacunas en el país, un día después de que decenas de ellos acampara en las inmediaciones del legislativo.

En la segunda jornada de protestas contra la obligación de vacunarse del llamado "Convoy 2022 NZ", los manifestantes intentaron traspasar el cerco formado por un centenar de agentes de la policía neozelandesa para intentar entrar en la explanada del Parlamento del país oceánico.

Varios camiones, procedentes de diferentes partes del país, aparcaron alrededor de las puertas del Parlamento de Wellington y del cenotafio del monumento a los caídos en las guerras, al tiempo que bloquearon las calles aledañas, según Radio New Zealand.

"Esto es extremadamente decepcionante", dijo en un comunicado el comandante de la Policía de Wellington, Corrie Parnell, al informar de los tres arrestos y advertir que sus agentes permanecerán vigilando toda la noche el Parlamento de Nueva Zelanda, país que al igual que Australia ha sido escenario de protestas contra la obligatoriedad de las vacunas.

La víspera, en el inicio de las sesiones legislativas en Nueva Zelanda, unos mil manifestantes protestaron pacíficamente en las afueras del Parlamento pidiendo que se les restaure las libertades perdidas por las medidas impuestas por la pandemia al considerar que atentan contra sus derechos humanos.

Decenas de manifestantes pernoctaron en tiendas de campañas contraviniendo las normas de la sede del Parlamento.

Ardern declaró este miércoles a la emisora local Newstalk ZB que si bien los neozelandeses tienen derecho a manifestarse, le preocupa la desinformación que circula entre ellos sobre la covid-19 y otros asuntos y la percepción de que "ellos creen que están salvando a todos".

"He visto una gama de protestas durante mi Gobierno y esta, ciertamente, no es de gran tamaño. Y no representan a la mayoría de los neozelandeses", detalló la mandataria laborista, cuya popularidad está en los niveles más bajos desde que asumió el Ejecutivo de Wellington en 2017.

Nueva Zelanda, cuyo gobierno implementó una de las estrategias contra la covid-19 más estrictas del mundo con confinamientos con pocas infecciones y el cierre de las fronteras internacionales, acumula unas 18.500 infecciones de covid-19 y 53 fallecidos y tiene a un 94 por ciento de la población mayor de 12 años vacunada con la pauta completa.

El Gobierno de Ardern, que fue aplaudida mundialmente al inicio de la pandemia por su gestión, anunció la semana pasada la reapertura escalonada de las fronteras internacionales, lo que incluirá a los turistas extranjeros entre julio y octubre. EFE

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