Menor del EI confiesa que tenía asignados ataques suicidas, según kurdosirios

Beirut, 18 feb (EFE).- Un adolescente de 14 años detenido esta semana en el este de Siria y vinculado al grupo yihadista Estado Islámico (EI) ha confesado que fue liberado de un campo de refugiados y que la formación terrorista le asignó misiones "suicidas", afirmaron este viernes las Fuerzas de Siria Democrática (FSD).

Beirut, 18 feb (EFE).- Un adolescente de 14 años detenido esta semana en el este de Siria y vinculado al grupo yihadista Estado Islámico (EI) ha confesado que fue liberado de un campo de refugiados y que la formación terrorista le asignó misiones "suicidas", afirmaron este viernes las Fuerzas de Siria Democrática (FSD).

La alianza armada liderada por kurdos, a cargo de la seguridad en buena parte del noreste del país árabe, aseguró en un comunicado que "el grupo terrorista EI le envió a Deir al Zur", provincia en la que le detuvieron el pasado martes, "para utilizarle en ataques suicidas".

El menor, identificado como Farhad Abdul Rahman al Turkestani, viajó a Siria junto a su padre para unirse al Estado Islámico y ya había sido arrestado en 2019 durante la ofensiva para arrebatar a los yihadistas su último reducto en la nación, según la nota, cuyas alegaciones no han podido ser verificadas independientemente.

Como otros miles de familiares del EI, Al Turkestani fue trasladado hace cerca de tres años al infame campamento de Al Hol (noreste) y, de acuerdo con la presunta confesión realizada a las FSD, más tarde fue "liberado" por una ONG con sede en Turquía actualmente sin presencia en el campo.

"Debido a su corta edad, la organización terrorista le posicionó entre los denominados 'Cachorros del Califato' afiliados al EI y le encomendó entrenar a los niños más pequeños. Ha recibido entrenamiento intelectual, ideológico y militar", explicaron las Fuerzas de Siria Democrática.

Según su versión, combatientes del grupo trasladaron al adolescente desde la zona de Palmira (centro), parte del vasto desierto donde se concentran en la actualidad los remanentes de la organización en Siria, hasta Deir al Zur, donde debía "participar en ataques suicidas".

Entre los pasados 20 y 30 de enero, las FSD se enfrentaron a un motín en una prisión del EI, donde los al menos 4.000 reclusos recibieron ayuda de yihadistas en libertad que hicieron detonar un coche bomba en sus inmediaciones y tomaron posiciones en viviendas civiles cercanas, dejando un total de 495 muertos.

En las últimas semanas ha crecido la presión para que las fuerzas kurdosirias divulguen información sobre al menos 700 menores del EI presuntamente utilizados como "escudos humanos" durante el alzamiento, ya que todavía no han hecho público si alguno de ellos murió o resultó herido en la violencia.

La ONG Red Siria para los Derechos Humanos denunció en un informe publicado el pasado año que las FSD internan en centros de detención a los arrestados durante redadas y campañas sin someterles a un proceso judicial ni permitirles comunicación con sus familiares.

Las autoridades kurdas se hacen cargo de unas 45.000 personas vinculadas al EI, muchas de ellas extranjeras, desde la derrota del grupo terrorista hace tres años y la comunidad internacional ha ignorado en gran medida sus llamamientos a repatriar a sus ciudadanos. EFE

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