Países Bajos, la revelación; Hungría, el fiasco

Redacción deportes, 18 ene (EFE).- La selección de los Países Bajos confirmó su condición como la gran revelación del Europeo de Hungría y Eslovaquia, tras lograr este martes el último billete en juego para la segunda fase al imponerse por 32-31 a Portugal, en una jornada en la que Hungría consumó su fracaso, tras quedar apeada del torneo al caer por 31-30 ante Islandia.

Redacción deportes, 18 ene (EFE).- La selección de los Países Bajos confirmó su condición como la gran revelación del Europeo de Hungría y Eslovaquia, tras lograr este martes el último billete en juego para la segunda fase al imponerse por 32-31 a Portugal, en una jornada en la que Hungría consumó su fracaso, tras quedar apeada del torneo al caer por 31-30 ante Islandia.

El conjunto magiar, al igual que ya le ocurrió en la primera jornada ante los Países Bajos, se vio superado por la presión de responder al cartel de claro aspirante a las medallas con el que arrancó el torneo.

Un papel que el conjunto magiar se había ganado merecidamente con sus notables actuaciones tanto en el pasado Campeonato de Europa como en el Mundial de Egipto 2021, en el que Hungría puso contra las cuerdas a la todopoderosa Francia en los cuartos de final.

Lejos de verse espoleados por los 20.000 espectadores que abarrotaron en cada encuentro de los locales el imponente Handball Arena de Budapest, la responsabilidad de responder a las expectativas de sus aficionados se convirtió en un lastre para el equipo magiar.

Ni la vuelta del pivote Bence Banhidi, la gran estrella del equipo húngaro, tras recuperarse de las molestias que le impidieron jugar el pasado domingo ante Portugal, sirvió para enderezar el rumbo de los magiares, que siempre fueron a remolque del equipo islandés.

Un oscuro panorama al que Hungría, que necesitaba ganar al menos por dos goles para sellar el billete para la segunda fase, pareció dar la vuelta, tras situarse a falta de doce minutos para la conclusión por delante en el marcador (25-26).

Pero los nervios volvieron a atenazar a los jugadores húngaros en un tramo final en el que Islandia, de la mano de un sensacional Omar Ingi Magnusson, autor de ocho dianas, y la efectividad de los extremos Bjarki Elisson y Sigvaldi Gudjonsson se alzó finalmente con la victoria (31-30).

El triunfo permitió al conjunto nórdico acceder a la siguiente ronda con dos puntos, los máximos posibles, en su casillero, tras concluir la primera fase como líder invicto del grupo B.

Si Hungría protagonizó la gran decepción del torneo, la selección de los Países Bajos ratificó su condición como la gran revelación del campeonato, tras lograr el último billete para la segunda fase al derrotar por 32-31.

En la victoria volvieron a jugar un papel fundamental el trío formado por el sensacional central Luc Steins, elegido mejor jugador del encuentro, y los laterales Kay Smits, autor de ocho dianas, y Dani Baijes, que cerró elduelo con seis tantos.

Los tres encontraron, a diferencia de encuentros anteriores, el apoyo del portero Bart Ravensbergen, que evitó con sus paradas que Portugal pudiese lograr la victoria por dos tantos que necesitaba para seguir en la competición.

Un sueño que los lusos, pese a las numerosas e importantes bajas con las que han afrontado este Europeo, lograron mantener vivo hasta los instantes finales, tras situarse con un gol de ventaja (30-31) a falta de minuto y medio para la conclusión.

Pero la inoportuna exclusión de Gilberto Duarte y un fallido lanzamiento del extremo Diogo Branquinho, que estrelló el balón en el poste a falta de treinta segundos para el final, permitieron a los Países Bajos alzarse con la victoria (32-31) y superar por primera vez en su historia la fase inicial.

Igualmente estará en la segunda fase y con dos puntos en su casillero la selección de Alemania, tras imponerse este martes por 23-30 a Polonia, en un encuentro en el que el conjunto germano tan sólo pudo contar con catorce jugadores a causa de los hasta nueve casos de coronavirus detectados en la expedición alemana.

Una circunstancia que obligó a la Federación Alemana a convocar con urgencia a cinco jugadores que llegaron a Bratislava apenas unas horas antes del inicio del encuentro con Polonia.

Entre ellos el veterano portero Johannes Bitter, integrante del equipo alemán que se proclamo campeón del mundo en el año 2007, el único guardameta con el pudo contar Alemania en el encuentro.

Esos percances parecieron espolear la competitividad del conjunto germano, en el que destacó el joven lateral Julian Koster, un jugador que todavía milita en la Segunda División de su país, que, con sus goles, seis, y sus asistencias protagonizó el juego ofensivo de los de Alfred Gislason.

De la mano de Koster, de 21 años, Alemania alcanzó medida la segunda mitad un ventaja de siete goles (16-23) que supo conservar ya hasta el final ante la impotencia de Polonia, que se tuvo que conformar con pasar a la siguiente fase como segundo clasificado del grupo D. EFE

jv/ism