"De Rerum Natura", la retrospectiva para comprender a José Antonio Sistiaga

San Sebastián, 27 ene (EFE).- La Sala Kubo de San Sebastián inaugura este viernes la exposición "De Rerum Natura", una retrospectiva para comprender la trayectoria de José Antonio Sistiaga, único artista vivo del mítico grupo Gaur, quien desde su primera obra, cuando era aún un adolescente, ha mantenido una mirada fiel hacia la naturaleza.

"Donostia vista desde Amara" fue el primer paisaje que este creador casi nonagenario pintó en 1947, a los 15 años. Ese pequeño cuadro abre la muestra en el espacio expositivo del Kursaal, donde se podrán contemplar hasta el 22 de mayo casi un centenar de piezas, incluidas algunas de las películas del creador donostiarra.

La naturaleza es, por tanto, el hilo conductor por el que ha optado el comisario de la exposición, Jean-Michel Bonhours, para dar a conocer la carrera de un artista que pasó de la figuración al informalismo sin perder su querencia por el paisaje. Lo llevó a la abstracción cuando todavía se estaba formando y con él experimentó una vez que encontró su propio lenguaje.

"Jardin des Tulleries" y "Paisaje vizcaíno" son dos obras claramente inspiradas en los coloridos lienzos de Kandisnky, ambas de 1956, de una primera etapa en la que Sistiaga estuvo inmerso en una formación autodidacta durante la que copió pinturas del Museo San Telmo de su ciudad y pintó del natural.

Parte de las obras del periodo 1955-1964 nunca habían sido expuestas anteriormente, algunas olvidadas incluso en el sótano de su casa, según ha explicado Bonhours, también cineasta y conservador del Centro Pompidou de París y amigo de Sistiaga.

De esa década, la de los años en que el artista vivió en París, Ibiza, San Sebastián y San Juan de Luz, hay una importante muestra de obra gráfica, de tintas, acuarelas y gouaches.

Esa vida nómada propició los contrastes en sus cuadros, como las tintas, que del negro transitaron hacia el color cuando Sistiaga se instaló en Baleares. También compatibilizó su producción influenciada por los informalistas franceses de sus días en París con sus paisajes de referencias simbolistas y postimpresionistas en los que trabajaba cuando se desplazaba a San Sebastián.

Junto a su obra gráfica se puede ver además la película muda "Ana", de 1969-70, un autorretrato del artista que se sitúa ante la cámara en un momento de crisis personal y que ha cedido la Filmoteca Vasca para la muestra.

El espacio superior de la Sala Kubo se ha reservado para "...ere erera baleibu izic subua aruaren...", el primer largometraje pintado directamente sobre película de la historia del cine, que realizó entre 1968 y 1970, y que lleva un título que Sistiaga le pidió a otro creador, Amable Arias, dada su facilidad para los idiomas imaginarios.

Los óleos de gran tamaño comenzaron a ser habituales en su producción, llegaron a ser incluso monumentales, como la gran tela en la que trabajó, y que ya no se conserva, para el edificio Torres Blancas de Madrid, del arquitecto navarro Francisco Javier Sáenz de Oiza.

Las líneas curvas, y los trazos veloces, violentos, de pinturas como "Vorágine", "Ráfaga" y "Acción vital", son ejemplos de ese periodo de los 70 a los que el visitante puede acercarse en esta exposición, donde cuelgan también sus "Suite érotique", serie de pastel graso sobre papel creada a lo largo de los años 80.

Sus últimas obras, las del proyecto "Velocidad, luz, color: un solo gesto, tres resultados diferentes" iniciado en la última década y en el que Sistiaga sigue trabajando, tienen cabida en esta retrospectiva, que incluye dos películas pintadas más: la ya conocida "Impresiones en la alta atmósfera" (1988-1989) y la inédita "Han (Allí) (Sobre el sol)", que comenzó en 1992 y que ha sido igualmente digitalizada.

"De Rerum Natura", que toma el nombre del famoso poema de Lucrecio, es un viaje por la obra de un creador que nunca ha dejado de mirar a la naturaleza como fuente de inspiración, un artista ausente este jueves en la presentación de la muestra a los medios de comunicación. EFE

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