Un avión oficial venezolano realizó este viernes un aterrizaje de emergencia en el aeropuerto internacional Camilo Daza de Cúcuta, una ciudad fronteriza en Colombia. Según fuentes oficiales, la tripulación de la aeronave, un Cessna 550 Citation II con matrícula venezolana YV3226, habría confundido la pista de aterrizaje con su supuesto destino original, lo que forzó a los pilotos a realizar la maniobra de emergencia.

El avión despegó en la mañana del aeropuerto internacional de Maiquetía, ubicado en Caracas, y aterrizó aproximadamente una hora y 20 minutos después en el aeropuerto de Cúcuta, de acuerdo con la página de seguimiento de vuelos FlightAware. No se ha confirmado el motivo del vuelo ni el número total de pasajeros. Sin embargo, algunos medios colombianos indicaron que la aeronave transportaba cinco personas, incluyendo a dos militares armados.

El presidente colombiano, Gustavo Petro, comentó en su cuenta de la red social X: "La información que tenemos sobre el aterrizaje del avión venezolano en Cúcuta es que se trata de una emergencia. Esperamos reporte de la Aeronáutica Civil, que es la autoridad competente para el caso".

Por su parte, la Aeronáutica Civil de Colombia (Aerocivil) emitió un comunicado en el que confirmó que la aeronave contaba con la autorización necesaria para realizar escalas técnicas en territorio colombiano, en conformidad con el Convenio de Chicago, el cual regula las operaciones aéreas internacionales. Este tratado permite el uso de aeródromos en casos de emergencia, como fue el incidente registrado.

En su declaración, Aerocivil explicó que la tripulación aparentemente confundió la pista de San Antonio del Táchira, una ciudad venezolana cercana a la frontera con Colombia, con la de Cúcuta. Estas dos ciudades están separadas por el río Táchira, lo que habría generado la confusión. En el comunicado, se menciona que el aterrizaje de emergencia se autorizó debido a que la aeronave "se encontraba en situación de peligro", conforme a las disposiciones del derecho internacional. Una vez que se recopiló la información pertinente y se determinó que la aeronave no representaba ningún riesgo, se autorizó el despegue para que el avión continuara hacia su destino final.