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El Real Madrid rompe su racha de derrotas con una sufrida victoria ante Casademont Zaragoza

Los jugadores del Real Madrid durante el partido contra el Zaragoza. / RMBaloncesto
Este triunfo, aunque necesario, deja al Real Madrid con muchas interrogantes en el apartado defensivo, un aspecto que deberá mejorar si quiere aspirar a títulos esta temporada

El Real Madrid rompió su mala racha de tres derrotas consecutivas al imponerse con sufrimiento al Casademont Zaragoza por 101-95. Aunque los blancos lograron la victoria, volvieron a mostrar sus problemas defensivos, un lastre que ha marcado este inicio de temporada. En los últimos cuatro partidos, el Madrid ha encajado una media de 92 puntos, una cifra inaceptable para un equipo con aspiraciones de campeón.

El partido no fue la excepción, ya que los maños lograron anotar 95 puntos, aprovechando las facilidades defensivas de los locales. Además, el conjunto blanco cometió 14 pérdidas de balón y tuvo un bajo porcentaje en triples (8/24), lo que complicó aún más el encuentro. A pesar de ello, los de Chus Mateo lograron salir airosos gracias a la regularidad de Dzanan Musa y Gabriel Deck, ambos con 18 puntos, y los momentos claves de Facundo Campazzo y Andrés Feliz.

En la primera mitad, el Zaragoza mantuvo el marcador igualado gracias al acierto de Marco Spissu (17 puntos con 4/5 en triples) y AJ Slaughter (13 puntos), además del dominio en el rebote con Dubljevic aportando 18 puntos durante todo el partido. El Madrid mejoró con la entrada de Serge Ibaka y Deck, logrando un parcial de 15-5 en el segundo cuarto que les permitió tomar ventaja (27-22, minuto 13).

Sin embargo, los visitantes reaccionaron de nuevo, apoyándose en el acierto exterior de Spissu y su dominio en el rebote ofensivo, lo que les permitió llegar al descanso con solo un punto de desventaja (47-46).

En la segunda mitad, el Madrid intentó despegarse en el marcador gracias a Campazzo, quien lideró el ataque con cuatro puntos seguidos y asistió para triples de Ndiaye y Musa, ampliando la ventaja a 66-56. Pero el Zaragoza, con un gran Bell-Haynes (21 puntos) y Dubljevic, volvió a recortar distancias, manteniendo el partido igualado hasta los últimos minutos (84-82, minuto 34).

El partido entró en una fase de tensión, con ambos equipos intercambiando canastas y errores. Finalmente, el Real Madrid logró sentenciar el encuentro gracias a dos robos clave y siete tiros libres, incluyendo un 2+1 de Tavares que puso el marcador 95-86 a dos minutos del final. Aunque el Zaragoza nunca se rindió, el Madrid consiguió mantener la ventaja y cerrar el partido con el definitivo 101-95, poniendo fin a su racha de derrotas.