Santillana del Mar

Nuevo escándalo en Santillana: El Ayuntamiento destapa una red de clientelar con el club de fútbol local

De izquierda a derecha: Carlos Toledo, secretario de la Federación; José Ángel Peláez, presidente de la misma; Sara Izquierdo, alcaldesa de Santillana; Rafael Oceja, concejal de Deportes, y Fernando Borrajo, secretario municipal. / A.E.

Dimisiones, deudas y chantajes: La oscura trama detrás del fútbol municipal en Santillana del Mar sale a la luz. El Ayuntamiento toma el control para salvar a los equipos y destapa las "malas prácticas" del anterior alcalde | "Han intentado chantajearnos utilizando a los niños como rehenes."

 

Santillana del Mar, conocida por su historia y encanto medieval, ha sido sacudida por un escándalo de grandes proporciones que ha conmocionado a sus habitantes. Lo que parecía ser una simple disputa sobre la gestión del fútbol local ha destapado una oscura trama de deudas, chantajes y conflictos de intereses que involucran al antiguo equipo de gobierno y al Club Deportivo Elemental Santillana (CDE).

Todo comenzó cuando la Junta Directiva del CDE, el club que gestionaba los equipos de fútbol de Santillana del Mar, presentó su dimisión en bloque. Este movimiento, que a primera vista podría parecer una decisión interna, rápidamente adquirió otra dimensión cuando el Ayuntamiento reveló que detrás de esta dimisión se escondía un intento de eludir responsabilidades financieras. "No vamos a permitir que escapen de sus obligaciones," declaró con firmeza Rafael Oceja, concejal de Deportes del municipio.

"Ese dinero falta en las arcas municipales y se tiene que recuperar."

El origen del conflicto: una deuda millonaria y subvenciones sin justificar

Según ha desvelado el Consistorio, el CDE tiene una deuda pendiente de 12.000 euros con el Ayuntamiento, dinero que fue entregado al club en forma de subvención durante la administración del anterior alcalde del PSOE, Ángel Rodríguez. "Este dinero nunca se justificó," ha afirmado Oceja, añadiendo que la subvención estaba destinada a la Escuela Municipal de Deportes (EMD) y no a un club privado. "Es inaudito que se utilicen fondos públicos para un club que actúa a espaldas del Ayuntamiento," subrayó.

Pero el agujero financiero no termina ahí. El club también tiene una deuda de 6.000 euros con la Federación Cántabra de Fútbol, lo que en total suma una deuda de 18.000 euros que ha quedado sin respuesta. Según Oceja, el CDE intentó presionar al Ayuntamiento para que asumiera esta deuda, amenazando con el descenso de los equipos de fútbol de categoría. "Han intentado chantajearnos utilizando a los niños como rehenes," denunció el concejal.

Ante esta situación, el Ayuntamiento ha decidido actuar con contundencia. En una serie de reuniones con la Federación Cántabra de Fútbol, encabezadas por la alcaldesa Sara Izquierdo y el presidente de la Federación, José Ángel Peláez, se llegó a un acuerdo para que los equipos municipales no sufran las consecuencias de esta crisis y puedan continuar compitiendo en sus respectivas categorías. "No vamos a permitir que los niños paguen por las fechorías de otros," enfatizó la alcaldesa.

"No tiene cabida dentro de la transparencia y la legalidad que se tenían que haber ejercido que el alcalde y el concejal de Deportes den una subvención al club al que pertenecen."

La dimisión de la Junta Directiva: ¿huida o estrategia?

El momento en que la Junta Directiva del CDE decidió dimitir en bloque no fue casualidad. Según fuentes cercanas al Ayuntamiento, esta decisión se produjo justo después de que el Consistorio exigiera al club el pago de la deuda. "Está claro que intentaron huir de sus responsabilidades," afirmó un portavoz del Ayuntamiento. Sin embargo, el Consistorio ha dejado claro que la dimisión no les exime de la obligación de devolver el dinero. "Ese dinero falta en las arcas municipales y se tiene que recuperar," advirtió Oceja.

La situación ha generado un gran malestar entre los vecinos de Santillana del Mar, quienes se sienten traicionados por una Junta Directiva que, según ellos, debería haber defendido los intereses de la comunidad en lugar de actuar en su propio beneficio. "No podemos creer que hayan jugado con el dinero de todos," comentó un vecino que prefirió mantenerse en el anonimato.

Conflicto de intereses: El exalcalde y el exconcejal, en el ojo del huracán

El escándalo se complica aún más con la revelación de que el exalcalde de Santillana del Mar, Ángel Rodríguez, ejercía como entrenador del club mientras ocupaba su cargo político, algo que ha sido calificado de "inmoral" e "incompatible" con su función pública. "Es un conflicto de intereses flagrante," aseguró Oceja, quien también denunció que el exconcejal de Deportes, Miguel Mata, formaba parte de la Junta Directiva del club. Aunque Mata no percibía un salario público, su participación en la directiva del club mientras ocupaba un cargo político también ha levantado sospechas sobre la transparencia de su gestión.

"No tiene cabida dentro de la transparencia y la legalidad que se tenían que haber ejercido que el alcalde y el concejal de Deportes den una subvención al club al que pertenecen," subrayó Oceja. Esta situación ha desatado una ola de indignación en el municipio, con numerosos vecinos exigiendo explicaciones y responsabilidades.

 

"Hemos alcanzado dos objetivos: recuperar una gestión completamente municipal en este ámbito deportivo y terminar de forma tajante con las malas prácticas dirigidas por el exalcalde."

El futuro del fútbol en Santillana del Mar: un nuevo comienzo

A pesar de la tormenta que ha envuelto al fútbol local en Santillana del Mar, el Ayuntamiento ha asegurado que el futuro de los equipos está garantizado. La gestión del fútbol municipal volverá a la Escuela Municipal de Deportes, lo que permitirá un control más transparente y eficiente de los recursos. "Hemos alcanzado dos objetivos: recuperar una gestión completamente municipal en este ámbito deportivo y terminar de forma tajante con las malas prácticas dirigidas por el exalcalde," afirmó con satisfacción la alcaldesa Sara Izquierdo.

Además, el concejal de Deportes ha anunciado que la EMD no solo continuará funcionando, sino que también se expandirá con la incorporación de nuevas disciplinas, como el fútbol femenino. "Se ha conseguido no solo que la gestión de la Escuela siga a flote, sino que siga creciendo y que ningún niño sufra las consecuencias," afirmó Oceja.

El Ayuntamiento también ha agradecido el apoyo de la Federación Cántabra de Fútbol en este proceso, destacando la disposición de su presidente, José Ángel Peláez, para encontrar soluciones que permitan a los equipos seguir compitiendo. "Gracias a la Federación, hemos evitado que nuestros equipos desciendan de categoría y hemos asegurado un futuro prometedor para el fútbol en Santillana," concluyó la alcaldesa.

"En Santillana del Mar apostamos por el deporte, por eso vamos a seguir creciendo y ampliando nuevas disciplinas."

Conclusión: Un nuevo capítulo para Santillana del Mar

El escándalo que ha envuelto al fútbol local en Santillana del Mar es, sin duda, un episodio que quedará en la memoria de los vecinos durante mucho tiempo. Las irregularidades y malas prácticas reveladas por el Ayuntamiento han puesto de manifiesto la necesidad de una gestión más transparente y responsable de los recursos públicos. Sin embargo, gracias a la intervención del Consistorio, el fútbol municipal ha encontrado un nuevo camino, más justo y prometedor.

Con la gestión del fútbol de vuelta en manos públicas y la promesa de nuevas disciplinas, Santillana del Mar se prepara para escribir un nuevo capítulo en su historia deportiva, dejando atrás las sombras del pasado y mirando hacia un futuro más brillante y transparente. "En Santillana del Mar apostamos por el deporte, por eso vamos a seguir creciendo y ampliando nuevas disciplinas," concluyó Rafael Oceja, enviando un mensaje de esperanza a todos los vecinos del municipio.