bien aparecida

¿La mejor fiesta de Cantabria? Todavía no ha pasado y es esta

Miles de cántabros peregrinarán hasta el santuario de Marrón, en Ampuero, para arropar a su patrona, la Virgen de la Bien Aparecida. / Miguel Ramos
Las Fiestas de la Bien Aparecida son un testimonio vivo de la devoción y la tradición que los cántabros han mantenido durante siglos

Cada 15 de septiembre, Cantabria celebra con fervor el Día de la Virgen de la Bien Aparecida, su patrona oficial desde 1905. Este día festivo es más que una celebración religiosa; es una manifestación de la identidad cántabra y de la profunda devoción de la comunidad hacia esta pequeña figura de la Virgen que, según la tradición, apareció milagrosamente en una ermita en 1605.

La historia de La Bien Aparecida

La veneración de la Virgen de la Bien Aparecida comenzó en el siglo XVII, cuando unos pastores encontraron una pequeña talla de la Virgen de 21,6 cm en una ventana de una ermita en ruinas, situada en lo alto de Marrón, en el municipio de Ampuero. El nombre de la "Bien Aparecida" proviene de la creencia en que la imagen apareció milagrosamente, iluminada por extrañas luces que condujeron a los niños hacia ella.

Desde aquel momento, la Virgen fue venerada por los cántabros como su protectora, y con el tiempo su santuario se convirtió en un lugar de peregrinación. La devoción continuó creciendo y en 1905 fue declarada oficialmente patrona de Cantabria. Cincuenta años después, en 1955, la Virgen fue coronada canónicamente por el obispo Eguino y Trecu, consolidando su importancia espiritual y cultural en la región.

Las fiestas de La Bien Aparecida

Las fiestas en honor a la Virgen de la Bien Aparecida, celebradas cada 15 de septiembre, son uno de los eventos más importantes de Cantabria, con una Fiesta de Interés Turístico Regional. Miles de fieles y visitantes acuden cada año al Santuario de Marrón para participar en la celebración.

Uno de los actos más destacados es la peregrinación al santuario, un ascenso a pie que recorre cerca de 5 km, pasando por los 15 pasos que representan la Pasión de Cristo. Esta caminata es tanto un acto de devoción como una oportunidad para los fieles de reflexionar en un entorno natural de gran belleza. Al llegar al santuario, se celebra una misa solemne, seguida de la tradicional romería y comida campestre, donde los cántabros se reúnen para disfrutar de la jornada festiva.

Además de la celebración religiosa, la fiesta incluye un mercadillo y actividades culturales que atraen tanto a locales como a turistas. La combinación de fe, tradición y cultura hace que esta festividad sea uno de los eventos más significativos del calendario cántabro.

El Santuario y la Imagen de La Bien Aparecida

El Santuario de la Bien Aparecida, situado en un paraje elevado cerca de Hoz de Marrón, es el corazón de la devoción a la Virgen. La imagen que se venera allí es una pequeña figura de 21,6 cm, con un vestido dorado y pliegues azules que recoge en su mano derecha. Su tamaño reducido y la singularidad de su aparición han contribuido a convertirla en un símbolo muy especial para los cántabros.

La imagen se conserva en perfectas condiciones a pesar del paso del tiempo, y cada año, miles de personas visitan el santuario para rendirle homenaje y pedir su protección. La Virgen de la Bien Aparecida sigue siendo una figura central en la vida espiritual de Cantabria, representando no solo la fe, sino también la unidad y el orgullo de la región.

Significado cultural e histórico

La importancia de la Virgen de la Bien Aparecida no se limita a su papel como patrona religiosa; también ha sido una figura clave en la identidad cántabra a lo largo de la historia. En el año 1752, los montañeses de Cantabria que residían en Madrid fundaron la Congregación de Nacionales de las Montañas de Burgos, bajo el patronazgo de la Bien Aparecida. Esta congregación ayudó a mantener viva la conexión entre los cántabros que vivían fuera de su tierra y su devoción por la Virgen.

El título de "Montañas de Burgos" identificaba el territorio que hoy comprende Cantabria, y aunque históricamente formaba parte de otras provincias, la Virgen de la Bien Aparecida unió a los cántabros bajo un mismo símbolo de fe y pertenencia.

El 15 de septiembre no solo se celebra el día de la patrona de la región, sino también la historia y el patrimonio que une a todos los habitantes de Cantabria. Ya sea a través de la peregrinación al santuario, la participación en la romería o la simple contemplación de la pequeña imagen de la Virgen, este día es un recordatorio del orgullo y la fe que definen a esta comunidad.