Despliegue sin precedentes: Marlaska refuerza con 400 antidisturbios en Ferraz para reprimir las protestas contra Sánchez
Acompañado por un aumento de 100 metros en el cordón policial, la acción busca reprimir las protestas contra Pedro Sánchez y la negociación de la ley de amnistía. Un despliegue sin precedentes que refleja la firme determinación del Gobierno ante las manifestaciones en aumento.
En una decidida medida para salvaguardar la sede del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha desplegado un contundente dispositivo de seguridad en la calle Ferraz. La acción se lleva a cabo en respuesta a las previstas protestas contra el presidente Pedro Sánchez.
En un movimiento sin precedentes, el titular de Interior ha movilizado a 400 agentes antidisturbios procedentes de diversas comunidades autónomas de España, quienes se unirán al operativo ya desplegado. Además, según informaciones obtenidas por OKDIARIO de fuentes policiales, se ha extendido el cordón policial en 100 metros adicionales, imposibilitando así el acceso de los manifestantes a la zona.
La orden directa de Marlaska refleja una firme determinación de la Policía para contener las protestas espontáneas que han surgido en contra de la polémica ley de amnistía, la cual Pedro Sánchez está negociando con los separatistas como parte de su proceso de investidura. En el día de ayer, tres grupos de la Unidad de Intervención Policial (UIP), compuestos por 50 agentes cada uno, custodiaron la sede de Ferraz, si bien su actuación fue objeto de críticas por el uso de gases lacrimógenos en manifestaciones pacíficas.
El día de hoy, el despliegue se ha ampliado de manera significativa, incluso incorporando agentes de distintas partes de España para reforzar los grupos ya desplegados. Fuentes dentro de la policía han revelado a OKDIARIO que el número de agentes podría triplicarse, permitiendo así un control más efectivo del perímetro de seguridad que abarcará varias calles circundantes a la sede central del PSOE. Este imponente despliegue busca asegurar la estabilidad en un momento crítico para el Gobierno de Sánchez.