Política

"El Gobierno está fallando": Ayuso revela la verdad incómoda sobre la inmigración

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. EP / Archivo
La presidenta de la Comunidad de Madrid subraya la integración como clave en la política migratoria, critica la inacción del Gobierno, denuncia tratos de favor hacia Begoña Gómez, y aboga por políticas restrictivas y apoyo a países de origen.

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha enfatizado en una entrevista con el diario La Razón la importancia de la integración como eje central para abordar el fenómeno migratorio en España. Ayuso expresó su postura de que es esencial apoyar a los migrantes hispanos y a aquellos que huyen de regímenes comunistas, argumentando que estos grupos no deben ser considerados inmigrantes, ya que "en España están en su casa". La presidenta madrileña también señaló la necesidad de rechazar a quienes buscan vivir "mantenidos" por el sistema.

Ayuso advirtió que la inacción del Gobierno central y su "falta de criterio" en la gestión migratoria representan "una amenaza" para la convivencia social, el sistema de bienestar y los servicios públicos. Según la presidenta, estos servicios ya están comenzando a mostrar signos de desgaste mientras el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, realiza lo que describió como "giras de autopromoción" en África, generando un "efecto llamada".

En su crítica al enfoque gubernamental, Ayuso se mostró contraria a las deportaciones masivas, calificándolas como de "dudosa legalidad" y advirtiendo que no abordan las causas fundamentales de un problema que podría intensificarse debido a factores como la sequía, los conflictos bélicos y la demografía africana. En lugar de ello, Ayuso propuso una estrategia que incluya ayudar a los países de origen a ofrecer oportunidades a sus ciudadanos, combatir a las mafias que trafican con personas, y aplicar "políticas restrictivas de entrada y permanencia" en España, similares a las que implementan países "medianamente bien gobernados". Asimismo, reiteró la importancia de la integración, un modelo que, según ella, Madrid aplica con éxito al evitar la creación de guetos y los círculos de exclusión entre los inmigrantes.

La presidenta madrileña denunció que los centros de acogida en la Comunidad de Madrid están "totalmente desbordados", con un aumento masivo de inmigrantes que llegan a través del aeropuerto, lo que ha generado "problemas de convivencia" en algunos municipios. Además, los centros de menores no acompañados han alcanzado su capacidad máxima, mientras que algunos alcaldes socialistas se niegan a abrir nuevas instalaciones para hacer frente a la situación.

Ayuso también defendió el "mestizaje" y la vida centrada en torno a la cultura española, rechazando la idea de pedir perdón por la identidad cultural de España y criticando el modelo de dependencia de las subvenciones. Según la presidenta, es más sencillo integrar a aquellos que comparten una cultura, idioma y religión similar, como es el caso de los hispanos y de quienes huyen del comunismo en Europa del Este. Estos últimos, destacó, comparten con los españoles "una aspiración, la libertad", y valoran el trabajo, rechazando vivir de subvenciones.

En otro ámbito, Ayuso reiteró su compromiso con Madrid, al que definió como "el proyecto de mi vida". También hizo un llamado a la unidad del centroderecha en las urnas, lamentando que algunos miembros de Vox parezcan más interesados en erosionar al Partido Popular. Sobre la posibilidad de convocar un Congreso Nacional del PP, Ayuso afirmó que "todos los días son importantes para marcar las calles", elogiando la gestión de Alberto Núñez Feijóo.

Por último, la presidenta madrileña criticó los supuestos tratos de favor en el caso de Begoña Gómez, esposa del presidente Pedro Sánchez, señalando que se habrían utilizado recursos del Estado para favorecer el desarrollo profesional de Gómez, pese a que, según Ayuso, no contaba con la experiencia necesaria. Ayuso instó a Gómez a "dar muchas explicaciones y dejar de perseguir a medios y jueces".