Caso Volhov

¡Increíble! La Fiscalía toma partido en el caso Volhov: ¿Qué significa para Puigdemont?

El expresidente de la Generalitat y prófugo de la justicia, Carles Puigdemont. / Glòria Sánchez
La Fiscalía apoya el recurso de Alay contra el juez Aguirre por actuar durante su recusación en la investigación de la trama rusa del procés, actualmente en manos de la Audiencia de Barcelona.

La Fiscalía ha decidido respaldar un recurso presentado contra el juez Joaquín Aguirre, quien investiga al expresidente catalán Carles Puigdemont y a otros implicados en la denominada trama rusa del procés. El recurso fue interpuesto por Josep Lluís Alay, jefe de la oficina de Puigdemont, debido a que Aguirre emitió resoluciones mientras estaba pendiente la resolución de su recusación.

El Ministerio Público, según publica The Objective, ha mostrado su apoyo a la apelación presentada por Alay, quien cuestiona la legalidad de un auto emitido por Aguirre en mayo, el cual dejaba sin efecto una decisión anterior de marzo que desestimaba los recursos contra la prórroga de la investigación del caso Volhov. Alay argumenta que el juez no podía emitir dicha resolución, ya que estaba en espera de la decisión sobre su recusación. Esta cuestión está ahora bajo consideración de la Audiencia Provincial de Barcelona.

En su informe, el fiscal Ricardo Sanz-Gadea indicó que "este Ministerio Público interesa la estimación del presente recurso de apelación y la revocación del auto recurrido", y criticó que Aguirre emitiera el auto de mayo mientras estaba recusado, insistiendo en que el juez no tenía autoridad para continuar con la instrucción. El documento, al que tuvo acceso The Objective, fue firmado el 7 de agosto, dos días después de que Aguirre rechazara aplicar la ley de amnistía a los investigados del caso Volhov.

El origen de la recusación se remonta a una entrevista que Aguirre concedió a la televisión pública alemana, donde mencionó una "influencia directa de Rusia en el proceso de independencia de Cataluña". Posteriormente, surgieron audios de una conversación informal del juez, difundidos en Internet, lo que llevó a Alay a cuestionar la imparcialidad de Aguirre y a solicitar formalmente su recusación.

Aguirre también rechazó la solicitud de apartarse del caso por supuesta pérdida de imparcialidad, argumentando que la denuncia de Alay sobre los audios difundidos constituía una "interceptación ilegal y una manipulación". No obstante, la Fiscalía ha mantenido su postura de que Aguirre debía haberse apartado hasta que se resolviera su recusación.

Puigdemont, que recibió a una delegación rusa en 2017, sigue siendo investigado por su supuesta implicación en la trama rusa, aunque hasta el momento no se ha demostrado ninguna ilegalidad. La prórroga de seis meses de la investigación fue autorizada por Aguirre en enero, pero su intervención posterior en el caso mientras estaba recusado ha sido objeto de disputa legal.

El abogado de Alay y Puigdemont denunció en julio que el caso Volhov y sus diferentes piezas constituyen una investigación "prospectiva" y acusó a Aguirre de intentar mantener "artificialmente abierto" el procedimiento, lo que, según él, vulnera derechos fundamentales. En respuesta, Aguirre defendió su actuación, afirmando que el abogado que le recusa está siendo investigado en una de las piezas separadas del caso.

Pese a las órdenes de la Audiencia de Barcelona para que Aguirre finalice la instrucción del caso, el juez decidió abrir una nueva causa el 21 de junio para investigar a Puigdemont por un presunto delito de traición, que, como la malversación, no está incluido en la ley de amnistía en ciertos casos.