El Partido Popular (PP) ha expresado su malestar con el Gobierno de Pedro Sánchez debido a las recientes negociaciones que el presidente ha mantenido con actores clave en el proceso de aprobación de los Presupuestos Generales del Estado (PGE). El PP denuncia que mientras Sánchez ha concedido beneficios al País Vasco y ha sostenido conversaciones con el líder de Junts, Carles Puigdemont, en Suiza, ha ignorado las demandas de los presidentes autonómicos del PP, como Alfonso Rueda (Galicia) y Juanma Moreno (Andalucía), tras reuniones en La Moncloa.

Ester Muñoz, vicesecretaria de Sanidad y Educación del PP, criticó públicamente la falta de compromisos de Sánchez hacia las comunidades gobernadas por su partido, afirmando: "Los presidentes del PP se fueron sin un solo compromiso para su territorio, sus urgencias y sus necesidades, pero Pedro Sánchez sí le dijo al presidente vasco que les cedería más cosas a cambio que le mantengan en el poder". La crítica de Muñoz refleja el sentimiento del PP de que Sánchez prioriza los intereses de sus socios independentistas y nacionalistas sobre los de otros territorios.

El presidente busca aprobar los PGE antes de finalizar el año y necesita el apoyo de sus socios de Gobierno. En este contexto, una delegación socialista, liderada por Santos Cerdán, se reunió con Puigdemont en Suiza el pasado viernes para intentar acercar posturas, tras las negativas de Junts a varias iniciativas gubernamentales. Además, Sánchez requiere el respaldo del Partido Nacionalista Vasco (PNV), por lo que las recientes concesiones al País Vasco han sido bien recibidas por representantes de ese territorio, como Pradales, quien expresó satisfacción tras su reunión con el presidente.

En el marco de las negociaciones para los PGE, también ha surgido una nueva demanda desde Esquerra Republicana de Catalunya (ERC). Marta Rovira, dirigente de ERC, ha condicionado el apoyo de su partido a la aprobación del cupo catalán, señalando que "nos será prácticamente imposible entrar en cualquier diálogo o negociación de presupuestos para este 2025 si no vemos avances rotundos, si no vemos cumplimiento eficaz". Esta declaración, realizada durante el Consell Nacional de ERC, enfatiza que, sin avances en el cupo catalán, su partido no apoyará los presupuestos y podría incluso provocar la caída de Salvador Illa como presidente de la Generalitat.

Rovira también recordó el ajustado margen con el que se aprobó el acuerdo de investidura en ERC, subrayando que su apoyo actual a los socialistas es "exigente pero vigilante", y podría cambiar si no se cumplen los compromisos pactados. El partido ha mantenido esta línea en los últimos años, buscando avanzar en función de los acuerdos con el PSOE.

Desde el PP, las críticas no se han limitado a Muñoz. El portavoz popular en el Congreso, Miguel Tellado, también expresó su descontento a través de sus redes sociales, calificando las negociaciones con Junts como "la prueba de que el Gobierno está acabado". Tellado señaló: "Repiten como loros que hay legislatura para largo, pero, después de sufrir otro revolcón en el Congreso, han mandado al inefable Cerdán a Suiza para seguir regalando lo que es de todos".

El PP ha mostrado su indignación por lo que perciben como una estrategia de Sánchez orientada exclusivamente a mantener el poder mediante concesiones a los grupos independentistas y nacionalistas, a expensas de otras regiones del país.