Sánchez defiende el pacto fiscal para Cataluña como avance hacia "una España federal"
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha comparecido en el complejo presidencial de La Moncloa para hacer balance del curso político en medio de un entorno convulso. Este evento tuvo lugar solo unas horas después de que Sánchez compareciera ante el juez como testigo en la investigación relacionada con su esposa, Begoña Gómez. Además, el acuerdo recientemente sellado entre el PSOE y ERC para investir al socialista Salvador Illa como presidente de la Generalitat de Cataluña ha sido un punto caliente de la jornada.
El Pacto con ERC
Pedro Sánchez ha calificado el acuerdo con ERC de "magnífico", aunque ha evitado desglosar los detalles del mismo. Según las explicaciones proporcionadas por ERC, el pacto incluye la concesión de un concierto económico para Cataluña, permitiendo su salida del régimen común. A pesar de la satisfacción y felicidad expresadas por Sánchez, los detalles concretos sobre cómo se implementará este concierto económico y qué efectos tendrá siguen sin ser claros.
El presidente del Gobierno, cuando se le preguntó sobre los detalles, respondió con evasivas, sin concretar cómo será el aterrizaje de este nuevo régimen económico y la ruptura de la caja común.
Un paso hacia la federalización
Durante su comparecencia, Sánchez reflexionó sobre el trasfondo político del acuerdo: "Estamos dando un paso en la federalización de nuestro Estado autonómico. Creo que eso es incuestionable y es una muy buena noticia para el sistema político español". Sin embargo, nuevamente, no ofreció detalles específicos sobre el camino hacia esta federalización.
Las declaraciones de Granada y Barcelona han puesto en el corazón del PSOE la apuesta por un modelo federal, aunque este sentimiento se ha diluido en los últimos años y no ha sido una característica prominente en sus programas electorales. Además, este modelo federal no incluía la ruptura de la solidaridad fiscal, un tema que el Gobierno rechazaba tajantemente hasta hace pocos días.
Reacciones Internas en el PSOE
La concesión de un concierto económico para Cataluña ha generado controversia dentro del PSOE y entre otras comunidades autónomas. Ninguna federación socialista ha avalado esta medida y hasta cinco federaciones se han manifestado públicamente en contra. Emiliano García-Page, presidente de Castilla-La Mancha, expresó su esperanza de que esta promesa no se materialice, declarando: "Estoy convencido de que mi partido no va a terminar avalando esto".
Frente a estas críticas internas, Sánchez se ha defendido escudándose en que la Ejecutiva del PSOE, compuesta por un núcleo duro de fieles, avaló el pacto con ERC por "unanimidad", con solo una abstención. Para Sánchez, esto legitima su decisión y anula las críticas de los líderes territoriales.
Críticas al PP y a Feijóo
En su comparecencia, Sánchez mencionó la palabra "concierto" solo una vez para criticar al PP y a Alberto Núñez Feijóo, sin explicar en qué consiste el concierto fiscal. "El señor Feijóo fue un visionario defendiendo en 2016 un concierto económico para Cataluña, no dijo ni solidario. Y ahora, en cambio, es un golpe de Estado fiscal, como fue golpe de Estado también la amnistía", declaró Sánchez. De esta manera, validó implícitamente lo anunciado por ERC: el pacto supone un "concierto económico solidario".
Mensaje de Cohesión
Sánchez defendió que lo que fortalece o debilita la igualdad entre los españoles y la solidaridad interterritorial es tener al frente de los gobiernos tanto de España como de las comunidades a quienes apuestan por la cohesión social y territorial. Sin embargo, la financiación es un tema que provoca fricciones en los territorios, y las explicaciones de Sánchez sobre el acuerdo fiscal con Cataluña han sido escuetas y evasivas.