Al Laredo se le escapa el triunfo en el 95 de penalti
Del quinto al sexto puesto, además desperdiciando la oportunidad de colocarse tercero en caso de vencer, cayó el Laredo por el inexplicable empate concedido “in extremis” frente al Bergantiños (2-2). Los visitantes igualaron la contienda de penalti en el minuto 95 y con inferioridad de efectivos por la expulsión de Iván Garrido mediado el segundo período.
El equipo pejino comenzó perdiendo y fue capaz de dar la vuelta al resultado, pero terminó perdonando a un rival al que tuvo noqueado. El partido no pudo empezar de peor manera para los locales. A los cuatro minutos, el Bergantiños se adelantó con una jugada en la que el Laredo pecó de falta de contundencia defensiva. Pacheco centró desde la banda derecha, Pedrosa cedió el balón y Carlos fusiló a David Puras.
El primer tiempo tuvo juego intenso, mucho ritmo y llegadas a ambas áreas. El Laredo llevó la iniciativa y consiguió empatar antes de alcanzarse la media hora de juego. Diego Marta realizó un gran cambio de orientación buscando la posición de Rozas en la banda izquierda, el extremo puso un centro preciso al área y Álvaro se anticipó al guardameta para poner la igualada de remate de cabeza en el minuto 28. La igualada insufló confianza al Laredo, tomando el control del partido durante el último tramo de la primera parte aunque sin consecuencias para el marcador. El segundo tiempo comenzó como acabó el primero, es decir, con un Laredo dominador y dispuesto a completar la remontada aunque con problemas para generar ocasiones de entidad.
Por su parte, el Bergantiños mantuvo el planteamiento de aguardar el momento oportuno de sorprender. Una de las jugadas clave del partido se produjo en el minuto 69, cuando el visitante Iván Garrido recibió tarjeta roja directa por un encontronazo con Santa y dejó a los suyos en inferioridad de efectivos. El Laredo no desaprovechó la coyuntura y, de hecho, solo tardó cinco minutos en marcar. De una jugada de estrategia, en un saque de esquina que el equipo pejino ejecutó a la perfección, Sanmillán batió de cabeza a Santi Canedo. El partido pareció sentenciado a poco más de un cuarto de hora de la conclusión, pero el Bergantiños, inmerso en una racha de malos resultados, no se rindió. Los locales dilapidaron ocasiones para sentenciar y, superado el tiempo reglamentario, concedieron un penalti transformado por Marcos Remeseiro que llevó al traste el objetivo de la victoria.