La UEFA sanciona con 30.000 euros al Atlético por el comportamiento racista
El Comité de Apelación de la UEFA ha impuesto sanciones económicas y disciplinarias al Atlético de Madrid y al Anderlecht belga debido a los incidentes protagonizados por sus aficionados en competiciones europeas. El club rojiblanco deberá pagar una multa de 30.000 euros por comportamientos racistas de algunos seguidores en el partido de la Liga de Campeones ante el Benfica, mientras que el Anderlecht enfrentará una prohibición de venta de entradas para sus tres próximos encuentros a domicilio, tras los disturbios en el Reale Arena.
Multa y sanción al Atlético por comportamientos racistas
El Atlético de Madrid ha sido multado con 30.000 euros por el comportamiento racista de una parte de su afición durante el partido de Champions League ante el Benfica. Además, el Comité de la UEFA ha decidido que el club madrileño no podrá vender entradas a sus seguidores para el próximo partido como visitante en la competición europea. Esta sanción, sin embargo, queda suspendida durante un año en condición de periodo de prueba. De repetirse estos actos, el castigo se ejecutaría de inmediato.
Sanción ejemplar al Anderlecht por disturbios en el Reale Arena
Los hechos ocurridos durante el partido de Europa League entre la Real Sociedad y el Anderlecht han llevado a la UEFA a tomar medidas severas contra el equipo belga. Durante el encuentro, los aficionados del Anderlecht protagonizaron lanzamiento de objetos, disturbios públicos y daños en el estadio. La sanción que el club tenía en suspenso desde octubre de 2022 ha sido activada, lo que implica la prohibición de vender entradas a sus aficionados para el próximo partido UEFA.
Además, el Anderlecht deberá cumplir una prohibición adicional de dos partidos, sumando tres encuentros en total, en los que no podrá permitir la presencia de su afición en los estadios rivales. Junto a esto, la UEFA ha impuesto una multa de 60.000 euros por los incidentes.
Reparación de los daños en el Reale Arena
La sanción no solo incluye castigos deportivos y económicos. La UEFA ha ordenado al Anderlecht ponerse en contacto con la Real Sociedad en un plazo de 30 días para proceder a la reparación de los daños causados por sus seguidores. Entre los desperfectos se encuentran una pared de plástico rota y varios asientos dañados en el estadio donostiarra.
Estas sanciones reflejan la firme postura de la UEFA contra el comportamiento inapropiado de los aficionados, tanto por actos de racismo como por violencia en los estadios. La organización europea mantiene su compromiso de erradicar estas conductas y de asegurar que los equipos asuman las consecuencias de las acciones de sus seguidores.