Alberto Ginés se despide del podio en París
Con una puntuación total de 116.2, Ginés no logró revalidar su título ni alcanzar el podio en esta ocasión, después de una actuación que estuvo marcada por una primera mitad complicada en búlder, seguida de un intento de remontada en la cuerda.
Una final cuesta arriba desde el inicio
El camino hacia las medallas se tornó empinado para Ginés desde el principio. En la modalidad de búlder, el escalador extremeño se vio lastrado por una actuación que no estuvo a la altura de sus capacidades. Con una puntuación de apenas 24.1, Ginés se quedó muy lejos de los puestos de cabeza, ocupando el último lugar tras esta primera parte de la final.
Desde el inicio, la competencia en búlder fue feroz. Tres escaladores lograron completar el 'top' en el Bloque 1, pero Ginés no pudo ni siquiera alcanzar la presa de 5 puntos, mostrando cierta incomodidad y desesperación en esos primeros movimientos. La frustración era evidente en un deportista acostumbrado a brillar, y que ya había tenido problemas en esta modalidad durante la ronda clasificatoria.
El segundo bloque tampoco trajo mucho alivio para el campeón olímpico. Aunque mejoró ligeramente, solo consiguió sumar 4.7 puntos tras alcanzar la presa de 5 unidades en tres intentos. La pared vertical, que requería un gran equilibrio, también se resistió a Ginés, quien necesitaba completar un 'top' para mantenerse en la pelea por las medallas.
En el tercer bloque, Ginés mostró señales de recuperación. Este bloque, mucho más exigente físicamente, parecía adaptarse mejor a sus habilidades. Rápidamente, el español sumó cinco puntos y alcanzó la presa de los 10 puntos en tres intentos. A pesar de rozar el 'top', la fortuna no estuvo de su lado, y la posibilidad de una medalla se complicaba aún más.
El cuarto y último bloque de esta modalidad cerró la primera parte de la final para Ginés con 9.6 puntos adicionales, sumando un total de 24.1 unidades en búlder. Esto le colocó en la octava posición, muy lejos de los líderes, con el japonés Sorato Anraku a la cabeza con 69.3 puntos, seguido por el estadounidense Colin Duffy y el británico Toby Roberts.
La cuerda: un intento de remontada
En la segunda mitad de la final, correspondiente a la prueba de dificultad, Ginés tenía la difícil tarea de intentar una remontada épica. La cuerda es una modalidad en la que Ginés ha demostrado ser uno de los mejores, y esta vez no fue la excepción. El escalador español registró la tercera mejor subida con 92.1 puntos, mostrando una gran capacidad de recuperación y fuerza mental.
Sin embargo, a pesar de su excelente desempeño en la cuerda, la diferencia acumulada en búlder fue demasiado grande para superar. Con un total de 116.2 puntos, Ginés finalizó en la séptima posición, obteniendo un diploma olímpico pero quedando muy lejos de las medallas que tanto anhelaba.
El podio: nuevos nombres y viejas glorias
El podio de esta final olímpica fue testigo de la coronación de nuevos campeones y la confirmación de leyendas. El británico Toby Roberts se llevó la medalla de oro con una actuación sólida en ambas modalidades, destacando especialmente en la cuerda. El japonés Sorato Anraku, líder tras la primera mitad de la final, tuvo que conformarse con la plata después de no poder mantener su ventaja en la prueba de dificultad. El bronce fue para el austriaco Jakob Schubert, un seis veces campeón mundial que, una vez más, demostró su calidad en los grandes escenarios.
Un futuro prometedor a pesar de la derrota
Aunque no pudo repetir su hazaña de Tokyo 2020, Alberto Ginés sigue siendo una figura destacada en el mundo de la escalada deportiva. Su séptimo lugar en París 2024, aunque decepcionante para alguien que ha probado el oro olímpico, es un recordatorio de la exigencia y competencia de este deporte a nivel mundial. Con solo 21 años, Ginés tiene por delante una carrera que promete más éxitos y posiblemente otra oportunidad de subir al podio en los próximos Juegos Olímpicos.