La cumbre del G7 concluye con importantes acuerdos y mensajes a Rusia y China
La primera ministra de Italia, Giorgia Meloni, ha definido como un "éxito innegable" la cumbre del G7 que se llevó a cabo en Apulia, donde actuó como anfitriona. Meloni destacó el consenso alcanzado entre los participantes en torno a diversos temas, incluyendo la guerra en Ucrania y el conflicto entre Hamás e Israel en Gaza.
Meloni puso de ejemplo de este logro el hecho de que "la declaración final del encuentro fuera publicada un día antes del final", lo cual "no ocurre muy a menudo".
Uno de los puntos centrales de la cumbre fue el proyecto para otorgar a Ucrania un préstamo de 50.000 millones de dólares, financiado con los intereses de los activos rusos bloqueados en el extranjero. En relación a esto, Meloni envió un mensaje a Rusia, indicando que "sólo con paz se descongelarán estos activos".
Además, Meloni afirmó que la propuesta de paz presentada por el presidente ruso, Vladimir Putin, el pasado viernes, es "una iniciativa propagandística en lugar de una verdadera propuesta de negociación". Putin ofreció condiciones para que Rusia participe en negociaciones con Ucrania, incluyendo el reconocimiento por parte de Kiev de la soberanía rusa sobre las zonas actualmente controladas por Rusia, algo que Ucrania ha rechazado categóricamente. "Nos quiere dar información conflictiva", manifestó Meloni.
En cuanto a las relaciones con China, Meloni destacó que el G7 ha querido enviar un mensaje a Pekín: "El grupo está abierto al diálogo, pero nuestras empresas deben poder competir en igualdad de condiciones, dentro de un libre mercado basado en reglas".
Referente al Oriente Próximo, Meloni expresó su esperanza de que cesen las hostilidades, recordando que "no fue Israel quien empezó todo esto", refiriéndose al movimiento islamista palestino Hamás. "Ahora debemos trabajar por la paz, lo que significa diálogo, reconociendo el derecho de Israel a estar seguro, a vivir en paz y el derecho de los palestinos a tener su propio Estado en el que vivir pacíficamente", declaró.
Finalmente, Meloni abordó un punto de fricción en la cumbre: la posible inclusión del derecho al aborto en la declaración final. "La controversia sobre la palabra 'aborto' en la declaración final del G7 ha sido construida de manera totalmente artificial", afirmó Meloni, quien logró que este punto se excluyera de la declaración. La discusión "de hecho, no existió en la cumbre ni en nuestras conversaciones", según Meloni. "Entiendo las razones por las que surgen las controversias pero, por nuestra parte, no representó problema alguno", agregó.
En el plano electoral, Meloni expresó su intención de esperar a la nominación oficial del Partido Popular Europeo (PPE) en el Parlamento Europeo antes de decidir sobre la presidencia de la futura Comisión Europea. "La propuesta es un asunto del PPE y cuando esté completa haremos nuestras evaluaciones", dijo Meloni al final de la rueda de prensa, añadiendo su deseo de que Italia reciba una consideración "apropiada" en la nueva Comisión. "Espero que Europa comprenda el mensaje que ha llegado de sus ciudadanos. Quieren pragmatismo y menos ideología. Es un mensaje que ha llegado claro y esto es lo que me interesa". "El razonamiento sobre los roles políticos se hace mirando hacia abajo y no hacia arriba; lo contrario es un juego al que otros juegan", concluyó.