Francia

Los lepenistas claman contra el sistema electoral francés

La líder francesa, Marine Le pen. EP / Archivo
Los seguidores de Marine Le Pen denuncian el sistema electoral francés tras obtener casi diez millones de votos pero menos escaños que sus rivales, planteando desafíos para el futuro del Reagrupamiento Nacional.

En medio de un ambiente de decepción y frustración, los seguidores de Marine Le Pen y Jordan Bardella expresan su descontento por los resultados electorales del pasado domingo. Para muchos, la situación es vista como un claro reflejo de las deficiencias del sistema electoral francés, más orientado a evitar victorias del adversario que a reflejar proporcionalidad.

"Es un sistema diseñado para perpetuar las coaliciones de perdedores", lamenta Laurent Giaconbelli, destacado dirigente del Reagrupamiento Nacional (RN). Según los datos electorales, el RN obtuvo casi diez millones de votos, una cifra considerablemente superior a la alcanzada por las coaliciones de izquierda que conforman el 'Nuevo Frente Popular' y la agrupación 'Ensemble'. Sin embargo, estas últimas lograron superar en escaños al RN, dejando a este último en una posición desfavorecida.

El método mayoritario a dos vueltas, carente de proporcionalidad, ha sido criticado por sus detractores, quienes aseguran que bajo un sistema alternativo como el británico, Jordan Bardella habría asegurado su liderazgo desde la primera vuelta de las elecciones legislativas.

Marine Le Pen, líder del RN, ha sido cautelosa al abordar los resultados, reconociendo la derrota y subrayando la tradición del partido de aceptar los resultados electorales. No obstante, tanto ella como Bardella no han escatimado en críticas hacia lo que han descrito como una "alianza antinatural y sin honor" entre macronistas y las izquierdas, la cual habría incidido en el desempeño electoral del RN.

La ascensión de RN en el parlamento, pasando de 89 a 143 escaños, ha sido observada como un avance significativo, aunque insuficiente para mitigar el descontento entre sus seguidores, quienes señalan un sistema electoral que parece favorecer a las coaliciones establecidas.

El futuro del partido se presenta desafiante, con un liderazgo que deberá enfrentar tanto las limitaciones del sistema electoral como sus propios errores estratégicos y la percepción pública que se ha forjado en torno a ciertos candidatos. Con miras a las elecciones presidenciales de 2027, Marine Le Pen y su equipo planean redoblar esfuerzos para superar el "cordón sanitario" que los ha separado del poder ejecutivo.