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Tokio espera que próxima reunión con Washington y Seúl fortalezca cooperación
04 de agosto de 2023 (18:37 h.)
El primer ministro japonés, Fumio Kishida, dijo este viernes que espera que la reunión que celebrará con sus homólogos de Estados Unidos y Corea del Sur a mediados de mes sirva para "promover todavía más la cooperación estratégica" trilateral.
Kishida participará el próximo 18 de agosto en una cumbre con los presidentes estadounidense y surcoreano, Joe Biden y Yoon Suk-yeol, en territorio estadounidense, que espera que contribuya a "fortalecer la cooperación" entre sus países para responder a las amenazas de Corea del Norte y velar por el "orden internacional".
El mandatario japonés, que se abstuvo de dar detalles sobre la agenda concreta del encuentro, habló en estos términos al ser preguntado por la cumbre durante una rueda de prensa convocada hoy para hablar sobre la polémica implementación de un nuevo sistema de tarjetas de identidad nacional que viene experimentando problemas y ha lastrado el índice de apoyo a su Gabinete, entre otros factores.
Japón planea abolir en 2024 sus actuales tarjetas sanitarias para integrarlas en las tarjetas de identidad My Number, un plazo que va a mantener, dijo este viernes Kishida, pese a las críticas desatadas por una serie de errores, como la vinculación errónea de personas o cuentas bancarias, que han generado escepticismo hacia el sistema.
"Me disculpo por causar ansiedad a la gente", dijo Kishida, que añadió que se estudiarán los errores para corregirlos y evitar recurrencias, y que intentarán ganarse la confianza de la población sobre el sistema, ante el escepticismo y rechazo generado, que lleva varios meses lastrando la popularidad del mandatario.
Los problemas con las tarjetas My Number se suman a una serie de escándalos que han rodeado a su círculo cercano, entre ellos su hijo (destituido como secretario de su oficina por unas fiestas), algunos colaboradores estrechos envueltos en sucesos amarillista, o casos de soborno, que llevaron hoy a un viceministro a dimitir de su cargo.
Todo ello viene sucediendo ante los continuos rumores de una no lejana remodelación de su Gabinete tras el verano o incluso un posible adelanto electoral en medio de la caída de apoyo.
Kishida participará el próximo 18 de agosto en una cumbre con los presidentes estadounidense y surcoreano, Joe Biden y Yoon Suk-yeol, en territorio estadounidense, que espera que contribuya a "fortalecer la cooperación" entre sus países para responder a las amenazas de Corea del Norte y velar por el "orden internacional".
El mandatario japonés, que se abstuvo de dar detalles sobre la agenda concreta del encuentro, habló en estos términos al ser preguntado por la cumbre durante una rueda de prensa convocada hoy para hablar sobre la polémica implementación de un nuevo sistema de tarjetas de identidad nacional que viene experimentando problemas y ha lastrado el índice de apoyo a su Gabinete, entre otros factores.
Japón planea abolir en 2024 sus actuales tarjetas sanitarias para integrarlas en las tarjetas de identidad My Number, un plazo que va a mantener, dijo este viernes Kishida, pese a las críticas desatadas por una serie de errores, como la vinculación errónea de personas o cuentas bancarias, que han generado escepticismo hacia el sistema.
"Me disculpo por causar ansiedad a la gente", dijo Kishida, que añadió que se estudiarán los errores para corregirlos y evitar recurrencias, y que intentarán ganarse la confianza de la población sobre el sistema, ante el escepticismo y rechazo generado, que lleva varios meses lastrando la popularidad del mandatario.
Los problemas con las tarjetas My Number se suman a una serie de escándalos que han rodeado a su círculo cercano, entre ellos su hijo (destituido como secretario de su oficina por unas fiestas), algunos colaboradores estrechos envueltos en sucesos amarillista, o casos de soborno, que llevaron hoy a un viceministro a dimitir de su cargo.
Todo ello viene sucediendo ante los continuos rumores de una no lejana remodelación de su Gabinete tras el verano o incluso un posible adelanto electoral en medio de la caída de apoyo.