El Partido Popular de Cantabria, liderado por María José Sáenz de Buruaga, ha lanzado duras críticas contra la gestión del Gobierno de Pedro Sánchez, al que acusan de favorecer solo a ciertas comunidades en las negociaciones de los Presupuestos Generales del Estado y la financiación autonómica. El diputado popular cántabro Javier Noriega ha expresado su indignación en redes sociales, denunciando que las conversaciones se están llevando a cabo de forma exclusiva con el País Vasco y Cataluña, mientras se ignora a otras regiones, como Cantabria, y a órganos como la Conferencia de Presidentes.

En un tuit contundente, Noriega escribió: «Es inadmisible que el Gobierno negocie en exclusividad los Presupuestos en Suiza con Cataluña. El PSOE se niega a hablar de financiación autonómica en la Conferencia de Presidentes, donde están integradas TODAS las Comunidades Autónomas. ¡Ya está bien!».

Esta crítica se enmarca en un contexto en el que Pedro Sánchez ha enviado a su equipo negociador a Suiza para dialogar con Carles Puigdemont, líder del partido separatista Junts, con el fin de asegurar los votos de su formación en la aprobación de los próximos Presupuestos Generales. Sin embargo, estas negociaciones han generado malestar en otras comunidades autónomas, que sienten que están siendo marginadas en el proceso.

El Partido Popular de Cantabria ha señalado que las negociaciones secretas y la falta de transparencia en los acuerdos entre el Gobierno central y las fuerzas separatistas catalanas suponen una amenaza para la igualdad territorial. Según el PP, se está diseñando un modelo que beneficia únicamente a aquellas comunidades que han logrado obtener pactos bilaterales, dejando a Cantabria en una posición de clara desventaja.

Es inadmisible que el #Gobierno negocie -en exclusividad- los #Presupuestos del Estado en Suiza y con el País Vasco y se niegue a hablar de #financiación autonómica en la #Conferencia de Presidentes en la q están integradas TODAS las Comunidades Autónomas.#YaEstáBien
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— Javier Noriega Gómez (@javiernoriegago) September 21, 2024

María José Sáenz de Buruaga, presidenta de Cantabria y del PP regional, ha sido clara en su postura: «No vamos a permitir que Cantabria reciba ni un euro menos de lo que le corresponde para prestar los servicios esenciales a sus ciudadanos». Buruaga se ha mostrado firme ante la posibilidad de que el Gobierno central otorgue privilegios financieros a Cataluña y el País Vasco, en detrimento de otras regiones.

El debate sobre la financiación singular para Cataluña ha sido uno de los temas más controvertidos en la política regional. En la última sesión plenaria del Parlamento cántabro, una proposición no de ley (PNL) presentada por el Partido Popular, junto con el PRC y Vox, fue aprobada, dejando claro el rechazo de Cantabria a cualquier sistema de financiación que beneficie exclusivamente a Cataluña y el País Vasco. El PSOE, sin embargo, se abstuvo en la votación, lo que ha generado críticas entre los populares, que consideran esta postura una falta de compromiso con los intereses de la región.

Buruaga ha manifestado su intención de reunirse con Pedro Sánchez para exigirle que cumpla con los compromisos adquiridos con Cantabria y para abordar la necesidad de una reforma justa del sistema de financiación autonómica. En sus declaraciones recientes, Buruaga destacó que ya ha solicitado esta reunión en varias ocasiones, pero aún está a la espera de una respuesta del Gobierno central.

En su comparecencia en el Parlamento de Cantabria, Buruaga insistió en que, aunque Cantabria figura en los primeros puestos del ranking de financiación por habitante, la región sigue estando infrafinanciada y necesita más recursos para poder garantizar servicios públicos de calidad. «Cantabria y sus servicios públicos están infrafinanciados, como sucede en otras comunidades autónomas, y no podemos aceptar un sistema que privilegie a unos pocos en detrimento de la mayoría», afirmó.

Finalmente, subrayó en su intervención parlamentaria: «Voy a defender la igualdad de trato, derechos y oportunidades de los cántabros, y no voy a aceptar que un catalán tenga ni un euro, ni un derecho, ni una oportunidad más que un cántabro. Nuestra región no puede ser tratada como una moneda de cambio para los intereses políticos del Gobierno central».