Begoña reaparece junto a Sánchez tras su citación judicial
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, acompañado de su esposa Begoña Gómez, recientemente imputada por corrupción y tráfico de influencias, ha reaparecido en un mitin en Benalmádena, Málaga. Este evento, que ha coincidido con la campaña para las elecciones europeas del 9 de junio, ha sido interpretado por muchos como un plebiscito sobre la figura del presidente y su mujer.
Este acto público, el primero al que asiste Begoña Gómez tras su citación judicial para declarar como investigada el 5 de julio, ha atraído considerable atención mediática. Los asistentes al mitin corearon "Begoña, Begoña" cuando el secretario general del PSOE andaluz, Juan Espadas, agradeció su presencia, subrayando la relevancia emocional y simbólica de su aparición junto a Pedro Sánchez.
Discurso de Pedro Sánchez
Pedro Sánchez centró su discurso en agradecer el apoyo y la cercanía de los simpatizantes del Partido Socialista, manifestando que durante los últimos meses ha sentido la solidaridad y el compañerismo del partido ante los ataques hacia él y su familia. "Voy a hablaros desde el corazón", comenzó, destacando que en medio de los ataques "muy duros" por parte de lo que denominó "internacional ultraderechista", ha sentido el apoyo de su partido y de sus seguidores.
El evento se celebró en un ambiente lleno de banderas arcoíris, europeas y del Partido Socialista. Sin embargo, más allá de ser un mitin orientado a los comicios europeos, parecía centrarse en la defensa personal de Sánchez y Gómez, dada la naturaleza de los cánticos y los vítores del público.
Sánchez evitó hablar extensamente sobre la cita europea y, en su lugar, inició una ronda de críticas hacia lo que describió como "el asedio vil de la derecha y la ultraderecha" y el "silencio cómplice" de medios digitales que, según él, ensucian el debate público en España. En su discurso, mostró su solidaridad con los concejales y militantes socialistas que han sido víctimas de ataques similares.
El presidente explicó el "nexo de unión" que, según él, existe entre Feijóo, Abascal, y varias asociaciones ultraderechistas como Hazte Oír y Manos Limpias. Pidió a los asistentes que el próximo domingo "toda la gente de izquierdas, progresista y europeísta vaya en masa a votar al Partido Socialista para que gane la política sana, los avances sociales y sea derrotada la política sucia y los recortes y la agenda reaccionaria de Feijóo y Abascal, de esa internacional ultraderechista".
Referencias a Líderes Internacionales
Además de sus adversarios políticos directos en España, Sánchez mencionó a figuras internacionales como Aznar, Milei y Netanyahu, calificándolos como opuestos "al lado bueno de la historia, que es donde está la socialdemocracia, en España y en Europa". Subrayó que "quien quiera paz y justicia social, aquí tiene al Partido Socialista".
Participación de Begoña Gómez
La presencia de Begoña Gómez fue un punto central del mitin. Gómez se abrazó con la vicepresidenta primera, María Jesús Montero, y con la candidata socialista Teresa Ribera, mostrando una imagen de unidad y apoyo en medio de las adversidades judiciales que enfrenta. Esta aparición pública se ha interpretado como una muestra de desafío y solidaridad frente a las acusaciones y la citación judicial.
Intervención de Teresa Ribera
Teresa Ribera, candidata a las elecciones europeas, también intervino en el mitin. Recordó al socialista Pedro Zerolo y portó una bandera arcoíris durante su discurso. Ribera destacó la importancia de tomarse en serio los ataques políticos actuales y defendió con firmeza los derechos de las mujeres. "Somos estupendas. Tenemos una primera fila espectacular de candidatas, de personas comprometidas, de mujeres que saben que merece la pena defender nuestros derechos, que no nos los van a quitar", exclamó, concluyendo con un enfático "¡no pasarán!".
Repercusión Política
Este mitin en Benalmádena ha marcado una defensa pública significativa de Pedro Sánchez y Begoña Gómez ante las acusaciones y la citación judicial que enfrenta Gómez. La campaña se ha transformado en un escenario donde el presidente busca reafirmar su liderazgo y el respaldo de su base electoral en un momento de intensa presión política y mediática. La estrategia de Sánchez parece estar orientada a movilizar a los votantes de izquierda, presentando las elecciones europeas no solo como una cita electoral, sino como un referéndum sobre su gestión y la integridad de su entorno.
El acto ha evidenciado la polarización política en España y la utilización de temas personales y judiciales en la arena política, subrayando la importancia de los comicios europeos como una plataforma para medir el apoyo popular a Sánchez y su Gobierno en un contexto de crecientes desafíos y polémicas.