REUNIONES SANCHEZ

Sánchez busca dividir al PP, pero los populares mantienen una postura: rechazan la insolidaridad

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, recibe a la presidenta de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga, en el Complejo de La Moncloa, a 27 de septiembre de 2024, en Madrid (España). Alejandro Martínez Vélez / Europa Press
Cuatro presidentes regionales del PP han desfilado ya por la Moncloa entre ayer y el viernes de la semana pasada, y el presidente del Gobierno no ha logrado ganarse a ninguno 

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El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha intentado, sin éxito, dividir a los presidentes autonómicos del Partido Popular en el debate sobre la financiación autonómica. Cuatro líderes regionales del PP han pasado por La Moncloa, y ninguno ha mostrado disposición a negociar bilateralmente. "La financiación autonómica debe decidirse en un foro multilateral", ha sido el mensaje común de estos encuentros, destacando que las negociaciones sobre esta cuestión no pueden ser fragmentadas ni sesgadas para favorecer a determinadas comunidades.

Un frente común del PP: las reuniones en La Moncloa

Los presidentes de Galicia, Andalucía, Cantabria y La Rioja —Alfonso Rueda, Juanma Moreno, María José Sáenz de Buruaga y Gonzalo Capellán, respectivamente— han transmitido a Sánchez la misma idea: la financiación autonómica no puede ser objeto de acuerdos bilaterales. Este mensaje refleja una coordinación clara entre los barones del PP, que rechazan los intentos del Gobierno de beneficiar a Cataluña en detrimento del resto de comunidades.

A pesar de las diferentes realidades y necesidades de cada región, los presidentes autonómicos del PP han mostrado una postura sólida y cohesionada. "Le he pedido expresamente que retire el concierto separatista y que corte de raíz cualquier avance hacia la independencia fiscal de Cataluña", declaró María José Sáenz de Buruaga, presidenta de Cantabria, a la salida de su reunión con Sánchez. Para Buruaga, este acuerdo con ERC es "profundamente injusto" y genera una "discriminación clara" entre ciudadanos.

El papel de la Conferencia de Presidentes

Uno de los puntos importantes en la agenda de las reuniones ha sido la celebración de la Conferencia de Presidentes, que tendrá lugar en Cantabria en diciembre. Antes, el 28 de octubre, el Gobierno ha convocado una reunión preparatoria en Madrid. Mientras Sánchez pretende que el foro se centre en la vivienda, los presidentes del PP exigen que la financiación autonómica ocupe un lugar prioritario. Juanma Moreno, presidente de Andalucía, fue claro en su postura: "No aceptaré ningún acuerdo que merme un solo euro los recursos de los andaluces".

Para los líderes del PP, la financiación es un tema crucial que debe discutirse de manera multilateral, y que debe garantizar que todas las comunidades reciban los recursos adecuados, sin privilegios para una sola. "Este acuerdo con ERC rompe el consenso constitucional del 78", insistió Buruaga, subrayando que este tipo de acuerdos socavan la convivencia y la igualdad entre las regiones.

El as en la manga del Gobierno: la quita de la deuda

A pesar de las tensiones, el Gobierno cree tener un as en la manga para atraer a las comunidades del PP: la quita de la deuda. Esta oferta, que ya se ha mencionado para Cataluña, podría extenderse a otras comunidades como compensación por los 15.000 millones de euros prometidos a la Generalitat en el acuerdo para la investidura de Sánchez. "Andalucía va a tener una oferta muy importante de quita de la deuda", adelantó la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero. Sin embargo, Moreno ha señalado que cualquier acuerdo que perjudique a Andalucía será rechazado.

Esta propuesta de quita de la deuda podría ser una herramienta clave para el Gobierno en las próximas negociaciones, pero los presidentes del PP ya han dejado claro que la prioridad es la financiación justa para todas las regiones, no medidas que puedan parecer un parche temporal.

Vivienda: otro foco de confrontación

El tema de la vivienda también ha sido uno de los puntos de fricción en las reuniones. La ministra de Vivienda, Isabel Rodríguez, lanzó una advertencia a las comunidades gobernadas por el PP, señalando que "si son insumisas con la Ley de Vivienda no recibirán fondos del Estado". Esta amenaza ha generado un fuerte rechazo por parte de los presidentes populares, que han criticado el enfoque confrontacional de la ministra.

Paloma Martín, vicesecretaria de Desarrollo Sostenible del PP, recordó que varias comunidades socialistas, como Navarra, Asturias y Castilla-La Mancha, tampoco han declarado zonas tensionadas para el alquiler, lo que demuestra que la amenaza del Gobierno no tiene una base coherente. Los presidentes del PP han defendido que la Ley de Vivienda no puede imponerse sin atender las particularidades de cada región, y que cualquier política de vivienda debe adaptarse a las realidades locales.

Una amenaza sobre el horizonte: la financiación privilegiada para Cataluña

Uno de los temas más candentes de las reuniones ha sido la financiación privilegiada para Cataluña. Tanto Alfonso Rueda como Juanma Moreno advirtieron a Sánchez de que este acuerdo debe ser cortado de raíz. Según Rueda, Galicia perdería 450 millones de euros si se lleva a cabo el acuerdo entre el PSC y ERC, mientras que Andalucía perdería 4.000 millones, según los cálculos de Moreno. "Utilizaré todos los instrumentos a mi alcance para paralizar este acuerdo", sentenció el presidente andaluz.

Esta preocupación no es nueva. Antes de iniciar la ronda de reuniones, Alberto Núñez Feijóo convocó a los barones del PP para fijar una postura común sobre la financiación autonómica. De estas reuniones salió un documento en el que los líderes populares reconocen las "particularidades" de cada comunidad, pero rechazan cualquier "desigualdad e insolidaridad" en la distribución de los recursos públicos. Este mensaje ha sido repetido por cada uno de los presidentes regionales del PP que han pasado por La Moncloa, subrayando la unidad de criterio dentro del partido.

El Gobierno disimula la decepción

A pesar de que Sánchez no ha logrado los resultados esperados en sus reuniones con los presidentes del PP, el ministro de Política Territorial, Ángel Víctor Torres, ha tratado de disimular la decepción del Ejecutivo. Sin embargo, la frustración del Gobierno se puede entrever en publicaciones como El Socialista, la revista del PSOE, donde se critica a Feijóo por su "fijación en alinear a sus barones" para que sigan sus instrucciones, aunque estas vayan en contra, según el PSOE, de los intereses de los ciudadanos de sus comunidades.

En este contexto, el Gobierno sigue apostando por su propuesta de quita de la deuda como una forma de intentar atraer a las comunidades gobernadas por el PP, aunque los líderes populares se mantienen firmes en que la financiación justa es la prioridad.

Próximas reuniones: un desafío para el Gobierno

El próximo viernes, 11 de octubre, Sánchez continuará con sus reuniones con los presidentes autonómicos, esta vez con Fernando Clavijo (Canarias), Jorge Azcón (Aragón) y María Chivite (Navarra). Estas reuniones serán clave para determinar si el Gobierno puede obtener algún avance en su estrategia de financiación autonómica o si seguirá enfrentando un bloque unido de presidentes del PP en este tema.