RACING-LEGANÉS | El SARDINERO, HOY 21 H.

Dani Raba debutará en El Sardinero con 27 años

Racing-Leganés.

El cántabro, cuyo abuelo y bisabuelo jugaron en el Racing, sólo recibió la llamada del club verdiblanco tras fichar por el Villarreal

Hoy el Leganés llegará con un jugador en sus filas que, además de ser muy importante para los esquemas que maneja su entrenador, Imanol Idiakez, es cántabro. Podría estar en el Racing y quizá sería lo más natural y ordenado, pero viste de blanquiazul. Puede ser culpa del destino o de un compendio de malas decisiones o falta de atención. El caso es que nunca recibió una llamada para haberse incorporado a las categorías inferiores racinguistas a pesar de que después ha acumulado varias decenas de partidos en el primer equipo del Villarreal y hoy es uno de los futbolistas más cotizados de Segunda División. Se trata, cómo no, de Dani Raba.

Todo racinguista reconoce ese apellido porque, si estuviera coloreado, alternaría letras verdes con blancas. De hecho, el portero del Racing en el primer partido de la primera liga española, allá por 1928, lo llevaba. Era Valentín Raba, bisabuelo del futbolista que hoy se colocará, previsiblemente en la banda derecha del Leganés, jugando a pierna cambiada. No acaba ahí la trayectoria de los Raba, ya que Chiqui Raba, el abuelo de Dani, jugó varias temporadas en el Racing de los sesenta, por lo que él, que siempre vio que se le daba bien el fútbol, parecía predestinado a jugar con asiduidad en El Sardinero. Sin embargo, a sus 27 años, no lo ha hecho nunca. De chaval porque nunca vistió la camiseta verdiblanca y de mayor porque ha jugado en equipos que han competido en pisos superiores a los que quedó condenado el conjunto cántabro.

Dani Raba terminó su formación en el Bansander. Allí culminó su etapa juvenil y fue entonces cuando por fin recibió una llamada procedente de La Albericia para que se incorporara al filial del Racing, pero, para entonces, ya se había comprometido con otro club que había andado más rápido. A él le habría gustado, seguramente, que las cosas hubieran sucedido de manera diferente, pero fue el Villarreal quien llamó a su puerta y fue vestido de amarillo como entró en el fútbol profesional.

En Villarreal estuvo Dani Raba seis temporadas y jugó 69 partidos con el primer equipo. Buscando un mayor protagonismo recaló en el Leganés, donde ha encontrado lo que buscaba porque está siendo parte fundamental de un proyecto que mira muy alto. Su objetivo es, sin duda, volver a Primera División, para lo que sabe que ha de hacerlo dando el salto con algún equipo. Y quiere que sea el madrileño porque sabe que tiene mimbres para ello.

La historia de Dani Raba coincide con la aparición en el Racing de Mario García, un futbolista a quien tampoco había llamado nunca el club verdiblanco hasta que culminó su etapa como juvenil. Cercano también es el caso de Marcos Bustillo y qué decir de Sergio Ruiz, quien parecía que no tenía sitio ni para jugar en Tercera División. Cuántos casos habrá como ellos a los que no ha terminado de encontrar nadie.