Aquí, los balnearios ofrecen una experiencia revitalizante que se puede complementar con escapadas por sus impresionantes paisajes.

Un viaje por los balnearios de Cantabria

A excepción de un centro de talasoterapia en Santander, los balnearios de Cantabria están situados en plena naturaleza o cerca de las playas, lo que los hace ideales para relajarse y conectar con el entorno. A continuación, exploramos algunos de los más destacados.

1. Balneario de Alceda

Situado en un edificio del siglo XIX en el valle de Toranzo, el Balneario de Alceda es conocido por ser el manantial más caudaloso de Europa de aguas sulfurosas. Recomendadas para tratamientos dermatológicos, respiratorios y reumatológicos, sus cálidas aguas son perfectas para quienes buscan relajación y bienestar.

Este balneario ofrece una amplia gama de tratamientos, que incluyen hidromasajes y baños termales, diseñados para revitalizar tanto el cuerpo como la mente.

2. Balneario de las Caldas

El Balneario de las Caldas, ubicado en Besaya, es el más antiguo de Cantabria. Sus aguas, que emergen a 37 ºC, están indicadas para tratar problemas del sistema nervioso y dolencias respiratorias. Desde tiempos romanos, sus propiedades han sido reconocidas, alcanzando popularidad en la época de Isabel II.

Aquí se pueden disfrutar de chorros termales, sauna y baños de burbujas, todo en un entorno que invita a la relajación.

3. Balneario de Liérganes

En la pintoresca villa de Liérganes, a solo 15 minutos de Santander, este balneario del siglo XX está rodeado de naturaleza. Ofrece más de 30 técnicas termales que van desde baños de leche hasta envolvimientos de algas. Ideal para tratar problemas de piel y estrés, es un lugar donde la tradición y la modernidad se encuentran para ofrecer una experiencia única.

4. Balneario de Puente Viesgo

Cercano a las cuevas prehistóricas, el Balneario de Puente Viesgo cuenta con aguas cloruradas y sódicas, indicadas para problemas circulatorios y respiratorios. Este balneario, conocido por su Templo del Agua, ofrece un circuito termal que incluye piscinas, cascadas y ríos contracorriente, todo en un espacio de 2.000 m², ideal para quienes buscan un escape de bienestar.

5. Balneario de Solares

Rehabilitado en 2006, el balneario de Solares combina una estética clásica con instalaciones modernas. Sus aguas son ideales para tratamientos del aparato locomotor y digestivo. La piscina termal de 900 m² es perfecta para rehabilitación y ejercicio, ofreciendo una experiencia que recuerda a los antiguos baños romanos.

6. Hotel Balneario La Hermida

Ubicado en un impresionante desfiladero, el Hotel Balneario La Hermida combina lujo y bienestar. Este establecimiento de cuatro estrellas, que recuperó su actividad en 2006, cuenta con un balneario de 2.000 m² que incluye una amplia gama de tratamientos, desde hidromasajes hasta cromoterapia.

7. Centro de Talasoterapia Hotel Real

El único complejo termal de cinco estrellas de Cantabria se encuentra en El Sardinero, Santander. Este hotel se especializa en el uso de agua de mar, complementada con algas y lodos marinos, ofreciendo una experiencia de bienestar completa. Entre sus tratamientos se incluyen varias opciones de duchas, sauna y una gama de terapias antiestrés.

Un destino para todos

Los balnearios de Cantabria no solo son un refugio para quienes buscan tratamiento de salud, sino también para aquellos que desean disfrutar de un entorno natural privilegiado. Con opciones para todos los gustos, desde tratamientos relajantes hasta experiencias más intensivas, Cantabria se posiciona como un destino ideal para el turismo de salud.

La riqueza natural de Cantabria, junto con sus aguas termales, hacen de esta comunidad autónoma un lugar único para desconectar y revitalizarse. Los balnearios, en medio de paisajes espectaculares, ofrecen un refugio perfecto donde combinar salud, bienestar y turismo. ¡Es el momento de disfrutar de lo mejor que Cantabria tiene para ofrecer!