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Rescate al límite: Una mujer y sus dos perros a punto de morir en el río Asón

Un agente de la çGuardia Civil junto al Asón. / OPC

Una tarde de terror en Ramales de la Victoria, donde el rápido accionar de los agentes evitó una tragedia en las peligrosas aguas del Asón.

 

La Guardia Civil de Cantabria protagonizó un rescate heroico en la tarde de ayer cuando logró salvar a una mujer y sus dos perros de raza pastor alemán que estuvieron a punto de ser arrastrados por la fuerte corriente del río Asón a su paso por Ramales de la Victoria, en la zona de Cubillas.

A las 18:30 horas, la central de emergencias de la Guardia Civil (062) recibió una llamada del servicio 112, alertando sobre una mujer y sus dos canes en apuros dentro del río. Los efectivos, tras desplazarse al lugar, encontraron a la mujer gritando desesperadamente, completamente agotada y en un evidente estado de nerviosismo, incapaz de salir del agua mientras trataba de proteger a sus perros de ser arrastrados por la corriente.

Dos valientes guardias civiles, sin dudarlo, descendieron por una escarpada ladera hasta la orilla del río. La situación era crítica: la corriente amenazaba con arrastrar a los animales y a la mujer. Los agentes, provistos de una cuerda y en una muestra de coraje y organización, formaron una cadena humana junto a otros efectivos en la orilla, asegurándose firmemente a la cuerda mientras se adentraban en el agua.

Gracias a la rápida y eficaz intervención de los agentes de seguridad, lograron alcanzar a la mujer y sus perros, poniéndolos a salvo y sacándolos del agua en una hazaña que evitó lo que podría haber sido una tragedia.

La mujer, vecina de Santoña y de 56 años, presentaba síntomas de agotamiento y algunos arañazos ocasionados por sus propios canes, pero afortunadamente no precisó asistencia sanitaria. Los perros, aunque asustados, también fueron rescatados sin sufrir daños.

Aunque efectivos de bomberos se desplazaron al lugar para apoyar el rescate, la acción heroica de los agentes de la Guardia Civil hizo innecesaria su intervención.

Este incidente, que mantuvo en vilo a toda la comunidad de Ramales, pone de relieve una vez más el indispensable trabajo de los cuerpos de seguridad en situaciones de emergencia.