Laura Ponte y la cocaína oculta: la modelo comparte un episodio surrealista en El Hormiguero
Laura Ponte ha dejado a todos boquiabiertos con una de las anécdotas más impactantes contadas en El Hormiguero. En su visita junto a otras leyendas de la moda española como Inés Sastre, Judit Mascó y Nieves Álvarez, la exmodelo gallega no solo habló de su impresionante carrera en las pasarelas, sino que desveló un episodio estremecedor que vivió durante unas vacaciones en Colombia.
La charla con Pablo Motos comenzó de forma relajada, celebrando la trayectoria de estas cuatro supermodelos que han marcado un antes y un después en la industria de la moda española. Las cuatro acudieron al programa con motivo del Premio Telva de Moda 2024, un reconocimiento a sus décadas de éxito, y aprovecharon la ocasión para compartir recuerdos de sus inicios y los logros que han conseguido. Sin embargo, fue Laura Ponte quien acaparó toda la atención al relatar lo que inicialmente parecía una escapada tranquila y lujosa a Colombia, pero que terminó convirtiéndose en una pesadilla.
El relato impactante de Laura Ponte en Colombia
Según contó Ponte, lo que debía ser una experiencia relajante se transformó en una situación surrealista. Todo comenzó cuando eligió alojarse en una casa "ideal", que le habían dejado en Santa Marta, una ciudad costera del norte de Colombia. Lo que parecía el lugar perfecto para disfrutar de unas merecidas vacaciones lejos del bullicio se convirtió rápidamente en un escenario de peligro y confusión.
“Era una vivienda preciosa, yo estaba en la planta de abajo, sola, mientras que algunos amigos estaban alojados en las habitaciones de arriba. Me levantaba súper temprano, disfrutaba de los días, y todo parecía normal. Hasta que un día, muy temprano, me desperté y vi que dos hombres con metralletas estaban en mi habitación”, explicó Laura Ponte con una naturalidad que descolocó tanto a sus compañeras como a Pablo Motos y el público.
La exmodelo admitió que el miedo la invadió al ver a los hombres armados, pero curiosamente su reacción inmediata fue la vergüenza, ya que se encontraba desnuda en la cama. “Cuando me vieron, se dieron la vuelta y cerraron la puerta, como si nada”, recordó entre risas. Lo que en ese momento parecía solo un incidente extraño, pronto escaló cuando se dio cuenta de que la casa estaba llena de militares armados.
La redada y el hallazgo de la cocaína
Al salir de su habitación, Laura Ponte notó detalles que la hicieron sospechar que algo grave estaba sucediendo. "Vi a personas limpiando hamacas y una gallina suelta por el salón. Todo era raro, y cuando vi a un militar, me di cuenta de que no era solo una mañana cualquiera en Colombia", relató. Entonces, comprendió que estaba siendo testigo de una redada de la Interpol.
“Efectivamente, estaban llevando a cabo una redada y encontraron 500 kilos de cocaína en la casa", reveló Ponte, dejando a Pablo Motos y al resto de las supermodelos boquiabiertos. Según explicó, los narcotraficantes escondían la droga en bidones que luego soldaban y transportaban a Holanda. A pesar de la gravedad de la situación, Laura narró la experiencia con sorprendente ligereza y buen humor, casi como si fuera una anécdota más de sus aventuras por el mundo.
Las reacciones en el plató
Tras escuchar esta increíble historia, Inés Sastre, Judit Mascó, y Nieves Álvarez no pudieron ocultar su sorpresa, riéndose nerviosamente ante lo que acababan de oír. Pablo Motos también se mostró impresionado y comentó entre risas que "parece que a Laura Ponte siempre le pasan cosas extraordinarias". No es común escuchar una anécdota como esta, menos aún en un ambiente tan distendido como el de El Hormiguero, lo que hizo que la historia calara aún más en la audiencia.
Una vida llena de anécdotas extraordinarias
No es la primera vez que Laura Ponte comparte historias inusuales. A lo largo de su carrera, la modelo ha protagonizado numerosas anécdotas que la han alejado del estereotipo de la típica supermodelo. Su estilo desenfadado y su capacidad para reírse de situaciones incómodas o peligrosas la han convertido en un personaje querido y único en el mundo del espectáculo español. Durante la entrevista, Ponte también desmintió una vieja leyenda urbana que afirmaba que había sido secuestrada en Brasil, cuando en realidad había desaparecido temporalmente porque decidió irse a Miami sin avisar a su familia mientras trabajaba en Río de Janeiro.
Además, las cuatro modelos reflexionaron sobre la camaradería que existe entre ellas, desmintiendo la idea de que las supermodelos se llevan mal o son rivales. Judit Mascó, quien fue una de las primeras en hablar sobre este tema, comentó: "Eso es típico de las películas de serie B. Las malas, las que se roban los zapatos. Pero entre nosotras siempre ha habido mucho compañerismo y buen rollo".
Laura Ponte también recordó sus primeros pasos en la moda, cuando, a pesar de sus complejos físicos, se convirtió en una de las modelos más cotizadas del mundo. "Nunca me gustó desfilar, me daba mucha vergüenza que la gente me mirara", confesó, lo que provocó las risas cómplices de sus compañeras.
Un legado que trasciende la moda
Pese a que han pasado décadas desde que todas ellas alcanzaron la cima del modelaje, Laura Ponte, Inés Sastre, Judit Mascó, y Nieves Álvarez siguen siendo figuras icónicas en la moda española. Durante la entrevista, hablaron de cómo, pasados los 50 años, siguen trabajando en la industria, aunque con ritmos más relajados. Todas coincidieron en que, aunque sus carreras comenzaron hace muchos años, la amistad y el respeto mutuo han sido claves para mantenerse unidas y disfrutar de su profesión.