Tenista español

Alcaraz quiere estrenar su palmarés en la gira asiática

20 de septiembre de 2024, Berlín: El tenista español Carlos Alcaraz en acción junto a su compañero el alemán Alexander Zverev contra los estadounidenses Taylor Fritz y Ben Shelton durante su partido de dobles masculino durante el torneo de tenis Laver Cup en el Uber Arena. Foto: Andreas Gora/dpa Fecha: 20/09/2024. Firma: Andreas Gora / dpa
El tenista español Carlos Alcaraz quiere estrenar su palmarés en la gira asiática, a la que llega tras su buen rendimiento en la Copa Davis y en la Copa Laver, en las que parece haber recuperado un buen nivel tras la decepción del verano estadounidense.

Carlos Alcaraz, el joven prodigio del tenis español, llega a la gira asiática con el firme propósito de levantar su primer título en este circuito. Después de un verano algo irregular, marcado por sus tempranas eliminaciones en los torneos de Cincinnati y, especialmente, en el US Open, el tenista de El Palmar ha mostrado signos de recuperación en su rendimiento. La Copa Davis y la Copa Laver han sido claves para devolverle las buenas sensaciones en la pista, donde volvió a brillar y liderar a su equipo.

El primer reto de Alcaraz será en el ATP 500 de Pekín, un torneo que marcará el inicio de su preparación para los grandes objetivos que le restan en la temporada: los Masters 1000 de Shanghai y París-Bercy, las Finales de la ATP en Turín y, finalmente, las Finales de la Copa Davis. Con la mente puesta en estos desafíos, el número 3 del mundo buscará no solo recuperar su mejor versión, sino también sumar importantes puntos en el ranking mundial.

Un agosto para olvidar y un septiembre de esperanza

Tras su inesperado rendimiento en agosto, Carlos Alcaraz afronta este tramo final del año con energías renovadas. Las eliminaciones en Cincinnati y el US Open fueron duros golpes para el español, que llegó como uno de los favoritos. Sin embargo, su actuación en la Copa Davis y, sobre todo, su papel estelar en la Copa Laver, donde fue pieza clave en la remontada del equipo europeo, han servido para devolverle la confianza.

Alcaraz tendrá su primer examen en Pekín, donde debutará este viernes ante el joven francés Giovanni Mpetshi Pericard, número 51 del ranking ATP. El francés, de 21 años, destaca por su potente servicio y viene de alcanzar los octavos de final en el ATP 250 de Chengdú. Este año, además, alcanzó la cuarta ronda en Wimbledon y logró su primer título en el ATP 250 de Lyon, sobre tierra batida.

Posibles enfrentamientos complicados en su camino a las semifinales

Si logra superar a Pericard, Alcaraz podría enfrentarse en segunda ronda a Tallon Griekspoor o Miomir Kecmanovic, rivales a los que ya ha medido en distintas competiciones. El neerlandés, además, podría volver a ser su oponente en los cuartos de final de la Copa Davis.

Uno de los grandes nombres que acechan en su cuadro es el ruso Daniil Medvedev, número 5 del mundo y teórico rival en semifinales. Medvedev, a quien Alcaraz ha derrotado dos veces este año, es sin duda uno de los jugadores más peligrosos de esta gira. Otros tenistas que podrían complicar su camino son el argentino Francisco Cerúndolo y el ruso Karen Khachanov, ambos capaces de dar sorpresas en las rondas previas.

La revancha tras un 2023 complicado en Asia

El año pasado, Alcaraz tuvo una actuación discreta en esta gira asiática. En el ATP 500 de Pekín, cayó en semifinales ante el italiano Jannik Sinner, que posteriormente se alzó con el título. Shanghai, por su parte, fue el escenario de una derrota inesperada ante el búlgaro Grigor Dimitrov en octavos de final, y su mal rendimiento se extendió hasta el Masters 1000 de París-Bercy, donde no superó la primera ronda.

Tras un 2024 en el que Alcaraz ha jugado a un altísimo nivel, incluido el título de Wimbledon y su medalla de plata en los Juegos Olímpicos de París, el español buscará en esta gira no solo mejorar sus resultados del año pasado, sino también escalar posiciones en el ranking mundial. Con el alemán Alexander Zverev apenas 195 puntos por delante, el segundo puesto está al alcance de la mano, mientras que el número uno de Sinner parece inalcanzable por el momento.