La Universidad de Cantabria propone como mejorar el tráfico en la avenida de Oviedo-Julio Hauzeur

La Universidad de Cantabria (UC) ha presentado un proyecto destinado a mejorar la circulación en la Avenida de Oviedo-Julio Hauzeur, una de las arterias más transitadas de Torrelavega. En esta vía, se contabilizan diariamente más de 20.000 vehículos, una cifra que supera con creces la capacidad óptima de la infraestructura actual. Esta situación genera congestión y ralentización del tráfico, especialmente en horas punta, lo que repercute directamente en los tiempos de desplazamiento y la experiencia de los conductores que transitan por la zona.

Durante una reunión mantenida entre representantes de la UC y las autoridades locales, el equipo de análisis de tráfico de la universidad presentó un documento diagnóstico en el que se detalla la situación actual de la circulación en la avenida. El informe es el primero de varios estudios previstos y contiene una serie de recomendaciones iniciales para mejorar el flujo vehicular. Entre las primeras acciones propuestas se encuentra la optimización del sistema de semáforos en puntos clave, como el puente de Torres, así como el repintado y reorganización de dos rotondas que actualmente canalizan el tráfico en puntos críticos: la elíptica del Instituto de Educación Secundaria (IES) Miguel Herrero y la rotonda ubicada entre el supermercado Mercadona y el IES Besaya.

Estas modificaciones tienen como objetivo priorizar el tráfico en las áreas de mayor densidad, particularmente aquellas que conectan la ciudad con Puente San Miguel y la Autovía. La UC busca, de este modo, no solo mejorar la fluidez del tráfico, sino también reducir los tiempos de espera en los cruces y optimizar la circulación general en la avenida, que es una vía de paso crucial para los vehículos que se dirigen hacia la autovía o que circulan por la zona norte de Torrelavega.

El informe también anticipa la necesidad de profundizar en el análisis, especialmente con vistas a las modificaciones que serán necesarias una vez se cierre la entrada a la ciudad desde la fábrica Sniace, tras la finalización de la vía auxiliar. Este cierre tendrá un impacto considerable en el flujo de vehículos en la zona, por lo que será necesario realizar más estudios y recopilación de datos para poder evaluar sus efectos y mitigar las posibles complicaciones que puedan surgir a raíz de este cambio en la infraestructura vial.

Se prevé que las futuras evaluaciones permitan reorganizar el tráfico no solo en la Avenida de Oviedo-Julio Hauzeur, sino también en las zonas circundantes, a fin de que el cierre de la vía principal se lleve a cabo sin causar un perjuicio significativo a la fluidez de la circulación en toda la ciudad. La UC seguirá colaborando con las autoridades locales para asegurar que las medidas implementadas logren los objetivos propuestos.

En el encuentro también participaron otros actores relevantes del proyecto, incluidos representantes del departamento de Urbanismo y Movilidad, así como responsables de la Policía Local, quienes destacaron la importancia de mantener un control continuo sobre el tráfico durante el periodo de implementación de estas medidas.