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¿Comer y llevarte la decoración a casa? Así es el increíble restaurante en Cantabria que lo hace posible

Uno de los platos estrella del restaurante. / Palacio Helguera
En el Palacio de la Helguera, en Las Presillas, se encuentra Trastámara, un restaurante de alta cocina que fusiona lo mejor de la gastronomía cántabra con el diseño y la exclusividad 

En Trastámara, cada detalle cuenta, y no solo en la comida. Ubicado dentro del Helguera Palacio Boutique Antique, este exclusivo restaurante en Las Presillas, Cantabria, permite a sus comensales disfrutar de una cocina refinada en un entorno lleno de objetos decorativos, todos a la venta. Desde las vajillas y muebles hasta los candelabros, cualquier pieza puede ser adquirida y llevada a casa.

Este innovador concepto fue idea de la propietaria, la interiorista Malales Martínez Canut, quien diseñó el espacio inspirada en las piezas que recolectó en antiguos mercados y subastas. El restaurante y hotel de cinco estrellas, que también cuenta con un spa y piscina con vistas a los Valles Pasiegos, se ha convertido en un enclave perfecto para disfrutar del lujo y el diseño en medio de la naturaleza.

Un menú que fusiona sabores

A cargo de la cocina de Trastámara está el chef Renzo Orbegoso, un peruano afincado en España desde hace 16 años que aporta a la carta un delicado equilibrio entre la gastronomía cántabra y los sabores de Perú. Desde su llegada en 2021, Orbegoso ha diseñado un menú de temporada que rinde homenaje tanto a los platos clásicos de la región, como el cocido montañés, como a las delicias de su país natal, con platos como el arroz de pato al estilo del norte de Perú y la causa limeña.

Los pescados frescos, como el magano de guadañeta, el bacalao a la montañesa y el ceviche, provienen de la lonja de Santander y el Mercado de la Esperanza, asegurando la frescura y calidad de cada plato. El menú degustación de siete pases sorprende con platos como el rulo de langostino con brandada y gel de lima o el tiradito con tinta de calamar, guiños claros a la cocina peruana que complementan los sabores locales.

Todo está a la venta: Decoración a la carta

Lo que hace de Trastámara un lugar verdaderamente único es su concepto de anticuario viviente. Los comensales pueden admirar la decoración rococó, las vajillas de época y las cristalerías francesas, sabiendo que todo está a la venta. "Si un cliente compra algo hoy, lo sustituiremos mañana por algo nuevo", explica Malales Martínez.

Entre las piezas más codiciadas figuran vajillas antiguas, como una usada en el filme Lo que queda del día, o candelabros chinos adquiridos en subastas europeas. Martínez se abastece en antiguarios franceses, belgas y marroquíes, así como en pisos abandonados, donde restaura cuidadosamente las piezas antes de ponerlas a la venta.

Sabores auténticos y cocina de proximidad

La cocina de Trastámara se basa en productos de proximidad, con una clara inclinación hacia los pescados y mariscos de la región. Platos como el rape en su emulsión de pilpil o el rodaballo salvaje destacan en una carta donde los ingredientes frescos son protagonistas. Los vegetales provienen de huertas familiares locales, y el propio huerto del Palacio provee hierbas aromáticas, cítricos y brotes, utilizados tanto en la cocina como en las mermeladas servidas en los desayunos del hotel.

Los carnes también tienen un papel importante, con vaca tudanca y carnes asturianas de vacuno mayor que se sirven en platos como el steak tartar o el carpaccio. Además, el palacio elabora su propio vino, un tempranillo de Ribera del Duero, añejado en barrica de roble francés y americano.

Un Palacio con historia y glamour

El Palacio de la Helguera, una majestuosa casona del siglo XVII construida con piedra y sillería, fue en su día la residencia del Conde de Santa Ana de las Torres, mano derecha del virrey de Perú. Esta conexión con el virreinato peruano inspira parte de la cocina del restaurante. Tras vivir una temporada en Ibiza, donde se dedicó al diseño de interiores para celebridades, Martínez Canut decidió restaurar este palacio, que descubrió en un viaje por Cantabria.

Hoy, el Helguera Palacio Boutique Antique es un lugar de lujo con 11 habitaciones, piscina, spa y una vista panorámica de los Valles Pasiegos. Es el sitio perfecto para una escapada tranquila donde el diseño y la gastronomía se encuentran en armonía.

Trastámara es mucho más que un restaurante; es una experiencia en la que el lujo, el arte y la gastronomía se fusionan. Con una cocina que mezcla los sabores de Cantabria y Perú, y un entorno donde todo está a la venta, este lugar es una parada obligada para quienes buscan disfrutar de una comida exquisita en un ambiente que invita a la exploración y la compra. Helguera Palacio Boutique Antique es un lugar único donde el pasado y el presente se entrelazan de manera armoniosa, ofreciendo una experiencia inolvidable tanto para los amantes de la gastronomía como para los aficionados al diseño.