Maliaño, 18 ene (EFE).- El proyecto LIFE Anillo Verde de la Bahía de Santander, desarrollado por la Fundación Naturaleza y Hombre (FNYH) y la empresa pública Mare, del Gobierno de Cantabria, ha creado más de 200 hectáreas de conservación y ha eliminado 153 hectáreas de especies exóticas invasoras.

Una iniciativa que comenzó en 2015 y que ha terminado este año tras una inversión total de 2,5 millones de euros, de los que 1,5 millones los aporta la Comisión Europea, donde se han restaurado 78 hectáreas de humedales litorales, casi 12 humedales interiores y 56 de encinares, se han plantado cerca de 8.000 árboles y se han instalado 62 paneles informativos.

Mientras que en el ámbito de la educación ambiental, se han desarrollado diferentes actividades en las que han participado 11.200 personas, tales como charlas, rutas guiadas, voluntariados, talleres, visitas a los centros de interpretación o el programa "Reservas educativas" para escolares.

Los resultados de este proyecto se han presentado este martes en las Marismas de Alday, en Camargo, uno de los espacios incluidos en el Anillo Verde, en un acto al que han asistido el presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, el consejero de Medio Ambiente, Guillermo Blanco, la alcaldesa de Camargo, Esther Bolado, y el presidente de la FNYH, Carlos Sánchez.

"El Anillo Verde ha servido para generar aliados, es decir, la sociedad civil en general nos ayuda y nosotros les ayudemos a ellos a proteger la naturaleza porque entendemos que esto hay que hacerlo entre todos", ha asegurado Sánchez.

Asimismo, ha detallado que a lo largo de estos años han protegido, mejorado y ampliado el estado de conservación de las Marismas de Alday y la ría de Raos, en Camargo y en Santander, la Marisma de Engola y el pozal de la Diosera en Marina de Cudeyo, el encinar de Peñas Negras en Santa Cruz de Bezana, la ría de Solía en Villaescusa, los Pozos de Valcaba en Liérganes o las islas de la Campanuca en Elechas.

Y es que el proyecto LIFE Anillo Verde culmina con la creación de una infraestructura verde que agrupa a 10 espacios (201,48 hectáreas) pertenecientes a seis municipios del arco de la Bahía: Camargo, Santander, Villaescusa, Santa Cruz de Bezana, Marina de Cudeyo y Liérganes.

El proyecto nació con vocación de permanencia y por ello cuenta con una estrategia After LIFE para asegurar su continuidad en el futuro.

Por su parte, Revilla ha calificado como obra "extraordinaria" la actuación acometida en este "lujazo de espacio" como es el Anillo Verde, que configura un espacio de naturaleza para el ocio y el deporte complementario a la densidad urbana de la zona.

"Esto es lo que hay que hacer: cohabitar los ciudadanos, la lógica expansión de las urbanizaciones, pero, al mismo tiempo, conservando estos espacios que dan calidad a los entornos", ha apuntado el presidente.

Al igual que Revilla, el consejero de Medio Ambiente ha felicitado el trabajo en red de las diferentes entidades y ha destacado la importancia de participar en este tipo de iniciativas que, además de atraer financiación comunitaria a Cantabria y fomentar la empleabilidad verde, inciden directamente en la sensibilización ciudadana.

Mientras que la alcaldesa de Camargo ha resaltado el resultado "satisfactorio" de esta actuación que, para Carlos Sánchez, acerca las zonas verdes a la ciudadanía y permite la coexistencia entre el ser humano y la naturaleza. EFE

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