Riad, 25 ene (EFE).- Arabia Saudí restableció hoy sus relaciones diplomáticas "al completo" con Tailandia, tres décadas después de que el robo de joyas del palacio de un miembro de la familia real, seguido de un misterioso asesinato de diplomáticos saudíes en Bangkok, tensara las relaciones entre ambos países.

"Se acordó restablecer al completo las relaciones diplomáticas entre los dos países", se apuntó un comunicado conjunto difundido por la agencia de noticias oficial saudí SPA, durante la visita al país árabe del primer ministro de Tailandia, Prayut Chan-ocha, la primera de un alto cargo tailandés en 30 años.

El comunicado señaló que "este paso histórico se produce como resultado de los esfuerzos a largo plazo y a varios niveles de ambas partes para restaurar la confianza mutua y la amistad" y que, a partir de ahora, "se abre una nueva página en las relaciones entre Arabia Saudí y Tailandia".

Esto hará posible el nombramiento de embajadores en las dos capitales "en un futuro próximo", así como "el establecimiento de un mecanismo consultivo para fortalecer la cooperación bilateral", según la nota.

Por su parte, el primer ministro tailandés expresó que su país "desea poner fin a todas las cuestiones pendientes entre las dos partes, expresando su sincero pesar por los trágicos acontecimientos que ocurrieron en Tailandia entre 1989 y 1990" y afirmó que su gobierno ha realizado "grandes esfuerzos para resolver los casos anteriores".

Arabia Saudí rebajó sus relaciones con Tailandia después de que un empleado tailandés del palacio de un príncipe de la familia real saudí robara en 1989 joyas y diamantes (incluido uno azul de 50 quilates considerado uno de los pocos existentes al mundo), y enviara el botín a Tailandia a través de correo postal.

El ladrón consiguió regresar a su país, pero fue detenido un año más tarde y la Policía tailandesa devolvió una parte de las joyas robadas, aunque Arabia Saudí aseguró en aquel momento que numerosas de ellas eran falsificadas.

En 1990 tres diplomáticos saudíes fueron asesinados a tiros en Tailandia, un crimen seguido de otro del que fue víctima un ciudadano saudí propietario de una agencia de trabajo en Bangkok que contrataba a tailandeses deseosos de viajar al rico reino árabe.

Las autoridades tailandesas detuvieron entonces a cinco policías en relación con el robo de las joyas y el asesinato de los diplomáticos y del empresario saudí, pero ninguno de ellos ha sido condenado, por lo que el caso sigue sin resolverse tres décadas después. EFE

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