Berlín, 2 ene (EFE).- El líder del Partido Popular (PP), Pablo Casado, reincidió este miércoles en su rechazo a la reforma laboral que pretende sacar adelante el Gobierno de Pedro Sánchez, y pidió por el contrario bajadas fiscales y más flexibilidad laboral.

"Cuando España ha perdido en el último mes 200.000 empleos, cuando España lidera el paro en Europa y por supuesto el paro juvenil, no parece una buena idea que no haya más flexibilidad laboral sino todo lo contrario", afirmó Casado en referencia a los datos del paro publicados hoy.

Tras una reunión en la capital alemana con el nuevo jefe de la Unión Cristianodemócrata (CDU), Friedrich Merz, Casado avaló la ley laboral actual, aprobada por el anterior Gobierno del PP, y que, según dijo "está funcionando muy bien" y "ha creado millones de empleos".

El líder del PP subrayó que en vista de la inflación y de una posible subida de los tipos de interés es una "irresponsabilidad" reducir la flexibilidad laboral, y por ello su formación votará en contra de la propuesta del Gobierno.

Casado tildó además de "poco edificantes" las negociaciones del Ejecutivo para lograr apoyos y señaló que, si las formaciones que están en conversaciones para ello terminan por dar su respaldo "tendrán que explicar si quieren ser salvavidas de Sánchez una vez más".

"Cuando tenemos tan malas cifras como ha pasado hoy, lo que funciona no hay que cambiarlo," indicó el líder del PP.

Al mismo tiempo, sin embargo, abogó por implantar recetas como las que según dijo defiende el nuevo canciller alemán, el socialdemócrata Olaf Scholz, entre las que citó bajadas de impuestos, eliminación de trabas burocráticas y más flexibilidad laboral.

"España debería estar en ese grupo de países que crecen y crean empleo y no en el de los que lideran los ránkings de desplome de Producto Interior Bruto en pandemia y ahora están a la cola de la recuperación," advirtió. EFE

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