Pontevedra, 18 feb (EFE).- Tras dos horas de reunión con la subdelegada del Gobierno en Pontevedra, Maica Larriba, las familias de los marineros del Villa de Pitanxo aseguran estar "peor de lo que entramos" al encontrarse "más angustiados" y salir del encuentro "sin compromisos".

La portavoz de las familias, María José de Pazo, ha lamentado que "salimos con las manos vacías" de su reunión porque "hemos pedido que España mande medios para retomar la búsqueda pero solo nos dicen que lo están estudiando".

"Cada hora que pasa es más difícil encontrar un cuerpo. Ya sabemos que no tienen vida, pero los queremos de vuelta", ha señalado la hija del jefe de máquinas del buque siniestrado.

Los familiares de los marineros afirman estar "abatidos " y reiteran que la situación en la que se encuentran "es una tortura" porque, a pesar de que en España aseguran que se va a retomar la búsqueda, desde Canadá "nos dicen que nos están vendiendo humo".

Junto a ella, familiares de Martín Quino y Fernando González, otros dos marineros del Villa de Pitanxo, han explicado que tres barcos que estaban faenando en la zona "se van a acercar" al punto del naufragio para tratar de localizar a los desaparecidos.

"Pararon el jueves por la tarde porque había mal tiempo y le han pedido al capitán poder ayudar", ha señalado la pareja de Martín Quino, peruano de nacimiento, que tiene a un amigo enrolado en uno de estos barcos de ha optado por acudir al auxilio.

Se trata, han explicado, de una "iniciativa propia" de los barcos porque, según Jorge González, "están avergonzados de ver que no se hace nada", añadiendo que en estos momentos "dependemos solo y exclusivamente de la voluntad de estos pesqueros".

Entienden, concluye María José de Pazo, que "lo que pasó con el Villa de Pitanxo les puede pasar a ellos y si eso ocurre les van a dejar tirados", lo que según esta familiar está provocando "una indignación y un bochorno general". EFE

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