Barcelona, 25 dic (EFE).- Cabezas visibles del independentismo han aprovechado este sábado las tradicionales ofrendas a la tumba del primer presidente de la Generalitat republicana, Francesc Macià, para cargar contra el rey Felipe VI y la institución monárquica.

Como cada 25 de diciembre, a primera hora de la mañana, delegaciones de entidades, partidos e instituciones se han congregado en el cementerio de Montjuïc, en Barcelona, para homenajear a Macià en el 88 aniversario de su fallecimiento.

Uno de los que ha participado en las ofrendas florales ha sido Pere Aragonès, por primera vez como presidente de la Generalitat -fue investido el pasado mes de mayo-, que ha acudido acompañado del vicepresidente del Govern, Jordi Puigneró, y de las conselleres Laura Vilagrà, Gemma Geis y Teresa Jordà.

En sus declaraciones posteriores a los medios, Aragonès se ha referido al mensaje navideño del rey Felipe VI, que apeló a la unidad y el diálogo frente a la división y el enfrentamiento.

Aragonès ha reivindicado los valores republicanos y la defensa de la "causa de la libertad y el progreso", frente al "discurso vacío" del rey: "Esperábamos muy poco y ha aportado muy poco", ha dicho.

"Somos republicanos", ha subrayado Aragonès, que ha destacado el "contraste muy claro" entre la monarquía y la figura de Macià, que "unió la causa de la libertad y la causa del progreso".

Uno de los más críticos con el rey ha sido el diputado del PDeCAT en el Congreso Genís Boadella, que le ha reprochado su apelación a "ser ejemplo de integridad pública y moral".

Según Boadella, "no vale pedir ejemplaridad" cuando el propio rey "forma parte de una institución que no ha dado ningún ejemplo" ni "ninguna explicación por la salida del rey emérito" de España.

También el líder de ERC en el Ayuntamiento de Barcelona, Ernest Maragall, ha criticado el "cinismo" del rey al hablar de "integridad moral", algo que le suena "casi como una burla grotesca".

Por su parte, la presidenta del Parlament, Laura Borràs, ha destacado el "legado" de Macià: "Somos herederos de la legitimidad de las instituciones que él restauró y que han sobrevivido a 40 años de dictadura, con exilio, represión y persecución".

El secretario general de JxCat, Jordi Sànchez, ha comparado a Macià con el expresident Carles Puigdemont, por su determinación sin "renuncias" en defensa de la independencia de Cataluña.

"La historia se repite: tenemos un presidente en el exilio, perseguido, al que las instituciones del Estado quieren llevar ante un tribunal para encerrarlo en la cárcel", ha denunciado Sànchez, para quien "la determinación del president Macià es hoy también la determinación del president Puigdemont, de JxCat y de una mayoría de este país que está decidida a no renunciar absolutamente a nada".

El portavoz de Demòcrates de Catalunya, Antoni Castellà, ha defendido la "confrontación" y ha señalado que "la única vía para dar efectividad al mandato del 1 de octubre" pasa por "desbordar al Estado" mediante la unidad de instituciones y sociedad civil.

A su vez, el presidente de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart, ha hecho su "enésimo llamamiento a la unidad del soberanismo", una "unidad en la diversidad que será la fórmula" que permitirá "ser ciudadanos libres e iguales de la república catalana". EFE

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