Lisboa, 8 ene (EFE).- El Partido Socialista (PS) de António Costa se mantiene favorito para las elecciones legislativas del próximo 30 de enero en Portugal, con una intención de voto del 38 %, pero el líder de la oposición conservadora, el Partido Social Demócrata (PSD, centroderecha), sigue recortando distancias.

Según el último sondeo divulgado por el canal estatal RTP y el diario Público, el PSD obtendría el 32 % de los votos y reduce su desventaja con el PS, que ahora sólo está a seis puntos porcentuales.

En la última edición de este sondeo, divulgada en noviembre, los dos partidos estaban separados por 9 puntos porcentuales, y en la de hace justo un año, enero de 2021, les separaban 11.

Al igual que otras encuestas publicadas en los últimos meses, este sondeo recoge que no habrá mayorías absolutas y será necesario buscar entenderse con otras formaciones para gobernar.

En cuanto a los antiguos socios de izquierda que integraron con los socialistas la "geringonça", la coalición de comunistas y verdes subió un punto porcentual y obtendría el 6 % de los votos.

El Bloco de Esquerda tiene el mismo porcentaje, pero tras caer respecto a la anterior encuesta, en la que tenía un 7 %.

Los tres juntos sumarían un 50 % de los sufragios, a los que se podrían sumar los apoyos de otros partidos con los que se han entendido antes, como el animalista PAN (2 %).

Al otro lado del hemiciclo, el ultraderechista Chega, al que otras encuestas habían situado como tercera fuerza, aparece en el sondeo de RTP y Público en quinta posición, con un 5 %.

Iniciativa Liberal también tendría un 5 % y los democristianos, el CDS-PP -socio tradicional del PSD-, un 2 %.

Los entrevistados en este sondeo, realizado entre el 28 de diciembre y el 5 de enero, se mostraron más favorables a una nueva "geringonça" (25 %) que a un "bloco central" entre los socialistas y el centroderecha (24 %).

Un pacto entre fuerzas de la derecha sólo es apoyado por el 18 %.

Portugal celebra elecciones legislativas el 30 de enero, que fueron anticipadas después de que el Parlamento rechazase el Presupuesto para 2022 de los socialistas, que gobiernan desde 2015. EFE

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