Adís Abeba, 6 feb (EFE).- El comisionado de Asuntos Políticos, Paz y Seguridad de la Unión Africana (UA), Bankole Adeoye, reiteró hoy que es necesaria una "solución política" a la guerra que enfrenta al Gobierno de Etiopía y a los rebeldes de la región norteña de Tigré.

"Hemos hecho hincapié en la necesidad de una solución política que se base en la reconciliación y el diálogo nacionales", afirmó Adeoye en una rueda de prensa en la XXXV Cumbre Ordinaria de Jefes de Estado y Gobierno de la UA, que se clausura hoy en Adís Abeba tras inaugurarse este sábado.

El comisionado señaló que la organización panafricana "ha pedido continuamente un alto el fuego completo, inclusivo y que abarque a todos de forma inmediata e incondicional".

"Ésa -recalcó- es una prioridad número uno desde el primer día y sigue siendo una prioridad principal para la resolución pacífica del conflicto en el norte de Etiopía".

"Ciertamente, estamos involucrando a todas las partes. Sólo el compromiso cara a cara con todas las partes será el camino a seguir", indicó Adeoye sobre la mediación de la UA para acabar con la guerra liderada por su alto representante para el Cuerno de África, el expresidente nigeriano Olusegun Obasanjo.

El responsable de Asuntos Políticos, Paz y Seguridad de la Comisión (secretariado) de la UA también defendió la "garantía de acceso humanitario a las áreas necesitadas" en el conflicto armado.

"Todos clamamos por el regreso de la paz a Etiopía, la sede de nuestra Unión", concluyó el comisionado.

El primer ministro de Etiopía, Abiy Ahmed, manifestó este sábado en la cumbre su compromiso "firme" para alcanzar una "paz duradera y estable" y, como "gesto de buena voluntad", recordó que su país ha liberado a "sospechosos de alto perfil" para favorecer un dialogo nacional.

La guerra de Etiopía estalló el 4 de noviembre de 2020, cuando el Gobierno federal ordenó una ofensiva contra el Frente Popular de Liberación de Tigré (FPLT) -partido político que gobernaba la región- en represalia por un ataque contra una base militar federal y tras una escalada de tensiones políticas.

Si bien el FPLT avanzó posiciones hacia el sur a partir de octubre de 2021 y amagó con la posibilidad de marchar sobre Adís Abeba, el Ejército federal consiguió a finales del año pasado numerosas victorias militares y los rebeldes anunciaron su retirada a Tigré tras haber penetrado en la regiones vecinas de Afar y Amhara.

Según la ONU, unos 5,2 millones de personas necesitan ayuda humanitaria en Tigré y las regiones vecinas de Amhara y Afar debido a la guerra.

Asimismo, miles de personas han muerto y unos dos millones de personas han tenido que abandonar sus hogares por el conflicto. EFE

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