Los fotógrafos Gurutze Langarika, Gorka Gómez y Claudia Ezquerro se han proclamado vencedores en la 33ª edición del Certamen Fotográfico 'Un día en la vida de Camargo', que se celebró este sábado. Langarika se llevó el premio a la Mejor Fotografía, Gómez ganó en la categoría de Mejor Colección, y Ezquerro, en la categoría de Menores de 14 años.

Este prestigioso concurso, organizado por el Ayuntamiento de Camargo a través del Centro Cultural La Vidriera, atrajo a más de 100 fotógrafos profesionales y aficionados, no solo de Cantabria, sino también de otras comunidades como el País Vasco, La Rioja y Asturias. En total, se presentaron más de 300 fotografías, que capturaron diferentes rincones del municipio.

Una jornada dedicada a la fotografía

La jornada comenzó a las 09:00 horas con el reparto de dorsales, y desde ese momento los participantes recorrieron las calles de Camargo, fotografiando escaparates de comercios, locales de hostelería y empresas del valle. A las 17:00 horas concluyó el plazo de presentación de las imágenes, dando paso a la deliberación del jurado. Finalmente, a las 21:30 horas, se celebró el acto de entrega de premios.

Durante el evento, el alcalde de Camargo, Diego Movellán, destacó la importancia histórica del certamen, que ha reunido a más de 5.000 fotógrafos a lo largo de sus ediciones. Según el regidor, este concurso ha permitido que tanto los vecinos como visitantes vean el municipio desde una "perspectiva renovada".

Premios y exposición en La Vidriera

En esta edición, además de los ganadores absolutos, también fueron premiados Maite Moratinos, Miren Encina y David Goitia en la categoría de Mejor Fotografía, ocupando el segundo, tercer puesto y accésit, respectivamente. Asimismo, se entregaron accésits a Marco Díez en la categoría de Mejor Colección y a Mara García en Menores de 14 años.

Los ganadores tendrán la oportunidad de ver sus obras expuestas en noviembre en la sala de exposiciones de La Vidriera, donde también se mostrará una fotografía de cada uno de los participantes. El certamen repartió un total de 2.700 euros en premios, consolidándose como uno de los eventos fotográficos más relevantes de la región.