Un voraz incendio declarado en la madrugada del 28 de mayo ha causado estragos en la terraza de un local hostelero en Laredo, afectando gravemente al mobiliario exterior, la cristalera y diversos elementos interiores. La rápida intervención de los Bomberos del Servicio de Emergencias 112 del Gobierno de Cantabria logró controlar la situación y evitar que las llamas se propagaran a las viviendas situadas encima del establecimiento, que no sufrieron daños.

El Centro de Atención a Emergencias 112 del Ejecutivo autonómico recibió la llamada de alerta poco después de las 02:40 horas. Inmediatamente, se movilizaron efectivos del servicio de salvamento y extinción autonómico, así como del 061, la Guardia Civil y la Policía Local. Al llegar al lugar, los agentes constataron la presencia de llamas de gran intensidad en la parte exterior del establecimiento, lo que generaba un peligro inminente de propagación del fuego al interior del local y a las viviendas adyacentes.

Los bomberos, con una eficacia que merece reconocimiento, comenzaron las labores de extinción inmediatamente. Su principal objetivo fue reducir la carga de calor y cortar la propagación horizontal del fuego al interior del local. Gracias a su pericia, lograron sofocar las llamas con rapidez. Posteriormente, procedieron a una revisión exhaustiva de la instalación utilizando una cámara térmica, con la finalidad de detectar y eliminar cualquier punto caliente que pudiera reavivar el fuego.

Durante las operaciones, se ventiló la zona afectada tanto de manera natural, mediante la apertura de portales y ventanas, como con el uso de ventiladores. Esta acción fue crucial para asegurar que no quedaran focos ocultos que pudieran causar un nuevo brote del incendio.

El consejero de Fomento, Roberto Media, y el alcalde de Laredo, Francisco Sarabia, se personaron en el lugar para supervisar las labores de extinción y mostrar su apoyo a los servicios de emergencia. Su presencia subraya la gravedad del incidente y el compromiso de las autoridades con la seguridad de los ciudadanos.

La intervención de los bomberos y los cuerpos de seguridad no solo evitó una tragedia mayor, sino que también garantizó la seguridad de las familias residentes en el edificio afectado. Este incidente, aunque desafortunado, pone de relieve la eficacia y profesionalidad de los servicios de emergencia de Cantabria, cuya respuesta inmediata fue determinante para minimizar los daños materiales y proteger la vida de los ciudadanos.

Las causas del incendio aún están bajo investigación, y se espera que se esclarezcan en las próximas horas. Mientras tanto, la comunidad de Laredo respira aliviada, agradecida por la destreza y dedicación de sus héroes locales.