En una sesión plenaria marcada por intensos debates y posicionamientos políticos encontrados, el Parlamento de Cantabria aprobó ayer lunes una iniciativa para reprobar al presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, y a todo su gabinete por la reciente aprobación de la Ley de Amnistía. La propuesta, presentada por Vox y enmendada por el Partido Popular, recibió el apoyo conjunto de ambos grupos, sumando 18 votos de los 35 escaños totales.

Aprobación de Vox. La diputada Leticia Díaz de Vox, quien defendió la iniciativa, calificó la ley como contraria a la unidad de España, la igualdad de todos los españoles y los principios democráticos consagrados en la Constitución y el Estado de Derecho. Criticó severamente lo que considera un «abuso de poder» por parte del Ejecutivo central y acusó al presidente Sánchez de actuar de manera «tiránica». Además, aprovechó la ocasión para condenar las recientes declaraciones del ministro de Fomento, Óscar Puente, quien habría insultado al jefe de prensa de una formación política en redes sociales. La enmienda presentada por el PP eliminó el segundo punto de la resolución original de Vox, que pretendía también reprobar a los diputados nacionales de Cantabria que votaron a favor de la ley. Iñigo Fernández del PP lamentó los pactos de Sánchez con los independentistas y expresó su preocupación por las posibles implicaciones de la amnistía, incluyendo la liberación de presos de ETA.

Negativa del PSOE. En contraste, la socialista Ana Belén Álvarez argumentó que la ley fue aprobada por mayoría en el Congreso de los Diputados y que un parlamento no puede reprobar a otro. Calificó la iniciativa de Vox como un acto de «postureo patriótico» y criticó a quienes la respaldan por utilizarlo como bandera.

Rechazo del PRC. El partido regionalista PRC se posicionó en contra de la propuesta, argumentando que el Parlamento regional no puede reprobar a las Cortes Generales y expresando preocupación por las posibles repercusiones de la ley en la autonomía de Cantabria. Reproche a la consejera de Turismo por gestión de planes de sostenibilidad turística. Por otro lado, el Pleno también discutió una moción presentada por el PSOE para reprobar a la consejera de Cultura, Turismo y Deporte, Eva Guillermina Fernández, por su gestión de los planes de sostenibilidad turística de 2023. La propuesta, apoyada por el PRC y rechazada por el PP y Vox, fue motivada por lo que el PSOE considera una gestión deficiente que ha causado perjuicios a los municipios y falta de transparencia en las explicaciones parlamentarias. El diputado socialista Mario Iglesias criticó la incapacidad de la consejera para ofrecer explicaciones claras y precisas, acusándola de no decir la verdad y poner en riesgo los plazos de cumplimiento de los planes turísticos.

Argumentos del PP. En respuesta, el PP defendió la actuación de Fernández, argumentando que los problemas han sido resueltos satisfactoriamente y acusando al PSOE de presentar la moción como una «cortina de humo» para desviar la atención de otros temas políticos. En tanto, Vox y el PRC expresaron sus posiciones contrarias a reprobar a la consejera, cada uno por sus razones particulares, reflejando así las divisiones políticas presentes en la cámara regional. Ambiente político tenso y divisiones profundas en el Parlamento de Cantabria La sesión parlamentaria del lunes en el Parlamento de Cantabria no solo puso de manifiesto las profundas discrepancias entre los partidos representados, sino que también reflejó un clima político tenso y polarizado en torno a temas sensibles como la unidad nacional y la gestión pública. La iniciativa de Vox para reprobar al Gobierno central por la Ley de Amnistía desató un acalorado debate, donde se enfrentaron argumentos sobre la legalidad y las consecuencias políticas de la ley aprobada en el Congreso de los Diputados. Mientras Vox y el PP denunciaron un supuesto abuso de poder y una amenaza a la unidad de España, el PSOE defendió la legalidad de la norma y acusó a sus detractores de aprovechar políticamente la situación. Por otro lado, la moción para reprobar a la consejera de Turismo evidenció las tensiones internas en la gestión de los planes turísticos regionales. El PSOE criticó duramente la gestión de Eva Guillermina Fernández, acusándola de falta de transparencia y efectividad en la ejecución de los proyectos, mientras que el PP respaldó a la consejera y acusó al PSOE de utilizar la moción como una maniobra política.