La tradicional procesión de las reliquias de los Santos Mártires abrió ayer, víspera de la fiesta, los actos religiosos en honor de San Emeterio y San Celedonio, patronos de Santander.

Todas las campanas de la Catedral sonaron para ensalzar la procesión que presidió el deán de la Catedral, Francisco Sánchez. La procesión se inició desde la Iglesia Baja del Cristo, con una comitiva presidida por el Cabildo, que portó los dos relicarios de los Santos Mártires que fueron trasladados hasta el claustro de la Catedral.

Hoy miércoles, solemnidad de los Santos Mártires el obispo preside la misa solemne.

Hermanos torturados y decapitados en Calahorra en el año 298

San Emeterio y San Celedonio eran oriundos de Calahorra y sufrieron en esta ciudad el martirio por ser cristianos durante la persecución romana de Diocleciano, en torno al año 298. Las reliquias de los Santos Mártires fueron traídas a Cantabria en la Alta Edad Media para protegerlas de las incursiones árabes.