Zaragoza, 8 feb (EFE).- Almudena Amor, nominada a mejor actriz revelación en los Premios Goya por su papel en "El buen patrón", considera que los cambios generacionales forman parte de la vida y acoge con alegría la llegada al cine español de "más perfiles y nuevos tipos de mujer".

"Antes podíamos tener un poco un perfil de actriz. Ahora eso se está rompiendo poco a poco", ha señalado Almudena Amor en un encuentro con periodistas antes de participar en el ciclo de cine de la Universidad de Zaragoza "La buena estrella", a cuatro días de que se celebre la gala del cine español.

Como ha relatado, el otro día celebraba con María Ceresuela, nominada en su misma categoría por "Maixabel", que las cuatro mujeres nominadas al Goya revelación tuvieran "cuatro personajes con mucha fuerza, muy bien construidos y que son otro tipo de personajes que van apareciendo ahora".

El escritor y periodista Luis Alegre, a cargo de este ciclo, ha destacado que Amor ha sido "una de las mayores alegrías del cine español en los últimos meses" y desde que se presentaron "El buena patrón", de Fernando León de Aranoa, y "La abuela", de Paco Plaza, ha sido reconocida una "actriz extraordinaria".

Amor (Madrid, 1994) cuenta actualmente con estas dos películas en cartelera, aunque vive este momento de éxito "con mucha naturalidad": "Es una muy buena bienvenida, es como entrar a un sitio nuevo en el que no conoces a nadie y que te den esa bienvenida es muy bonito".

Como ha remarcado, a pesar de que tiene sueños como trabajar con el director y guionista de cine austríaco Michael Haneke, prefiere no tener expectativas, y sueña, pero se adapta, por lo que, si de repente "nadie la llama" y tiene que acabar dedicándose a otra cosa, espera estar igualmente feliz.

Aunque el teatro fue algo que compaginó con sus estudios de Publicidad, la intérprete ha revelado que no se decidió antes por la interpretación porque "tenía mucho miedo a exponerse" y en su familia no contaba con ningún referente que se hubiera dedicado a la profesión.

"Luego era tal la necesidad y el deseo de hacerlo que cuando acabé la carrera me di cuenta de que no tenía sentido no intentarlo. A veces, la necesidad es más grande que el miedo", ha confesado.

Sobre su primer papel protagonista en un largometraje, en "La abuela", la película de terror que llegó a los cines el 28 de enero, ha dicho que le enseñó que "lo importante que es confiar en el cuerpo, confiar en el instinto y no pensar tanto".

En este filme ha trabajado codo con codo con Vera Valdez, que interpreta a la abuela y que le despierta una gran admiración, ya que, a pesar de "haber vivido cosas increíbles y haber tenido una vida complicada", sigue teniendo unas enormes ganas de vivir.

De hecho, se trasladó a España para rodar la película: "Se cruzó medio mundo y cuando llegó la pandemia le mandó un mensaje a Paco (Plaza) y le dijo que se mantendría viva; era una persona de mucho riesgo".

"A mí me decía: 'Me gustaría ahora empezar una carrera en Europa». Y claro, estar hablando con una persona de 86 años que te dice que le gustaría empezar una carrera en Europa, me parece fascinante", ha relatado sobre esta intérprete, que "llegaba al set y era una jovencita y, hasta que no la maquillaban, no veías a la anciana".

En cuanto a cómo abordó su personaje en "El buen patrón", ha señalado que trabajó mucho "lo impredecible". En esta cinta comparte reparto con Javier Bardem, algo que le produjo "de primeras una sensación de vértigo porque quieres estar a la altura".

Eso sí, cuando llegó el segundo ensayo "esos miedos se fueron diluyendo".

"En el momento en el que le conoces, pasa a ser un compañero más, al que le tienes mucho respeto por todo lo que es", ha indicado la intérprete, quien no sabe "qué tipo de actriz quiere ser", pero tiene claro que le interesa mucho "la fragilidad del ser humano", algo a lo que acerca el cine con su "poder de empatía". EFE

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