Ginebra, 4 feb (EFE).- La organización de la ayuda humanitaria se acelera en Madagascar ante la llegada del potente ciclón Batsaria, que tocará la isla a partir de mañana, sábado, y que será la segunda catástrofe natural que golpeará este país en menos de dos semanas, tras una tormenta tropical que causó la muerte de al menos 116 personas.

Miles de personas ya han empezado a ser trasladadas a refugios para ponerlas a salvo del ciclón Batsaria, pero se teme que la fuerza con la que llegue - estimada en rachas de unos 200 kilómetros por hora - provocará el desplazamiento forzado de hasta 150.000 desplazados, dijeron hoy portavoces de organismos de la ONU en Ginebra, desde donde se coordina la ayuda.

En total, se estima que este desastre afectará a 600.000 personas, indicó el portavoz de la Oficina de Asuntos Humanitarios de la ONU, Jens Laerke.

“Lo más preocupante son las lluvias torrenciales. Se esperan entre 150 y 300 milímetros de agua que podrían caer sobre terrenos saturados por la tormenta tropical de hace algunos días o sobre zonas completamente secas sin capacidad de absorción, lo que aumenta el riesgo de inundaciones”, dijo por su parte la portavoz de la Organización Meteorológica Mundial (OMM), Clare Nullis.

El sur de Madagascar se ha visto afectado en los últimos meses por una grave sequía que ha disparado los niveles de alarma por grave impacto sobre la agricultura y la ganadería, lo que ha puesto a las comunidades afectadas en una situación alimentaria crítica.

Nullis indicó que todavía no se sabe si el ciclón impactará en zonas afectadas por esa sequía.

En un enlace por videoconferencia desde Antananarivo, la capital de Madagascar, la representante del Programa Mundial de Alimentos (PMA) de la ONU, Pasqualina Disirio, aseguró que tanto las autoridades como las organizaciones de socorro están haciendo todo lo posible para anticiparse a las consecuencias del ciclón.

Disirio explicó que las evacuaciones hacia centros de refugiados se han acelerado sobre todo en zonas costeras donde se temen fuertes inundaciones. En total se han habilitado 68 instalaciones para recibir a la población. EFE

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