La Paz, 20 ene (EFE).- Bolivia reportó 62 muertos y 10.897 nuevos contagios a causa de la covid en medio de la cuarta ola que azota al país y la reciente decisión gubernamental de suspender la exigencia del carné de vacunación contra la enfermedad para ingresar a sitios concurridos.

Con las cifras registradas en el último informe del Ministerio de Salud de Bolivia, los fallecimientos s acumulados desde marzo de 2020 ascendieron a 20.439 y los contagios a 785.094.

La mayoría de nuevos positivos se registró en la región central de Cochabamba, con 2.407, seguida por Santa Cruz con 2.264, La Paz con 2.089, Tarija con 1.202 y Chuquisaca con 1.112, según el reporte oficial.

En los otros cuatro departamentos los nuevos casos variaron entre 187 y 892, añade.

Los casos activos actualmente son 148.574 y el acumulado de pacientes recuperados es de 616.081.

Según las autoridades sanitarias, la tasa de letalidad en esta cuarta ola es del 0,6 %.

El ministerio también detalló que hasta el momento 5.562.359 personas han recibido la primera dosis de vacunas anticovid, otras 4.013.639 la segunda y 994.961 fueron inmunizadas con fármacos unidosis.

Además, 786.819 mayores de 18 años y personas con enfermedades de base han recibido terceras dosis de vacunas como refuerzo.

Según el informe, 655.116 adolescentes de 12 a 17 años recibieron primeras dosis y 409.794 completaron el esquema de vacunación, mientras que 479.570 niños de 5 a 11 años han sido inmunizados con primeras dosis y 124.820 con segundas.

NEGACIONISTAS TOLERADOS

La inmunización comenzó en Bolivia hace un año y se ha desarrollado por etapas hasta incluir desde diciembre a menores de 5 a 11 años, con una población "vacunable" calculada en unos 10,2 millones de personas de los cerca de 11 millones y medio de habitantes que tiene el país.

El Gobierno de Luis Arce anunció en la víspera la decisión de suspender la exigencia del carné de vacunación o la presentación de una prueba PCR para ingresar a sitios concurridos, a fin de evitar "medidas innecesarias de violencia" ante las protestas de los grupos contrarios a la inmunización, que en gran medida son sectores afines al oficialismo.

Esta decisión fue criticada por los gobernadores de las principales regiones bolivianas y algunos anunciaron que mantendrán la medida vigente al contar con normas regionales aprobadas dentro de las autonomías departamentales. EFE

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