Bruselas, 21 feb (EFE).- El alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, aseguró este lunes que "no hay lugar en Europa para una Bosnia-Herzegovina dividida" y señaló que aquellos que "trabajan en esa dirección" están "totalmente equivocados" y niegan a la población la posibilidad de vivir en un país "próspero".

En una rueda de prensa, el jefe de la diplomacia europea señaló que los ministros de Exteriores de la UE discutieron en su reunión de este lunes "cómo preservar la soberanía, la integridad territorial y la unidad" de Bosnia-Herzegovina y urgieron a los líderes políticos de la república balcánica a "asumir la responsabilidad de respetar la Constitución", garantizar la "vuelta completa" de las instituciones del Estado y "abordar las cuestiones abiertas".

"No hay lugar en Europa para una Bosnia-Herzegovina dividida y aquellos que trabajan en esa dirección están totalmente equivocados, están negando a su gente una perspectiva europea próspera", subrayó el diplomático español durante la comparecencia.

Los Veintisiete, detalló Borrell, mostraron su apoyo a los "esfuerzos" del Servicio Europeo de Acción Exterior, el alto representante internacional en Bosnia, Christian Schmidt, y el enviado especial de Estados Unidos, Michael Murphy, para "facilitar el diálogo político" y acercar posturas sobre la reforma electoral.

Además, el alto representante de Asuntos Exteriores de la UE afirmó que el bloque está "preparado" para "usar todos los instrumentos disponibles si la situación lo requiere", lo que incluye "ayuda financiera" o "medidas restrictivas", que serían utilizadas como "último recurso".

El pasado 10 de febrero, el Parlamento del ente autónomo serbio de Bosnia respaldó la creación de un sistema judicial propio, separado del central, en un paso anticonstitucional dentro del plan separatista del líder serbobosnio, Milorad Dodik.

La nueva norma prevé crear un consejo encargado del nombramiento de jueces y fiscales, y recuperar así una competencia que los serbobosnios cedieron al Estado central en 2004.

La oposición a Dodik le acusa de lanzar el plan separatista simplemente para atraer votos de cara a las elecciones de octubre y la comunidad internacional critica que los planes secesionistas estén elevando la tensión étnica en Bosnia a sus niveles más altos desde la guerra civil que enfrentó a serbios, croatas y musulmanes entre 1992 y 1995.

Dodik ha amenazado también con crear un Ejército y un sistema impositivo propios y romper de esta forma con los centrales, pero también niega que sus pasos sean separatistas y asegura que quieren reforzar la autonomía ante las pretensiones de los partidos nacionalistas musulmanes de centralizar el país, en contra de los intereses serbios y croatas. EFE

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