Barcelona, 25 ene (EFE).- La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, visitará este miércoles y jueves Cataluña en pleno debate sobre la reforma laboral, con el Ejecutivo buscando recabar el apoyo de ERC a la norma, cuya redacción fue consensuada con sindicatos mayoritarios y patronal.

Díaz se rodeará mañana de los sindicatos mayoritarios, UGT de Cataluña por la mañana y CCOO de Cataluña por la tarde, para defender la propuesta de reforma laboral y redoblar la presión sobre ERC, reacio a validar el texto.

El jueves, la ministra visitará las instalaciones de la automovilística SEAT en Martorell (Barcelona).

El presidente de la Generalitat de Cataluña, Pere Aragonès, que hace dos semanas cenó con Díaz en Madrid tras pronunciar una conferencia en el Club Siglo XXI, ya advirtió que "es muy difícil" que ERC apoye la reforma laboral, ya que lo que querría su partido es la "derogación de las reformas laborales de 2010 y 2012", y lo que se plantea ahora, en cambio, solo son "elementos parciales que se han modificado".

En la misma línea se ha pronunciado el líder de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, quien ha dicho que su partido "no vota proyectos personales" de reforma laboral, en alusión a las aspiraciones que pueda tener Díaz, y ha criticado que el Gobierno haya estado "nueve meses hablando con la CEOE", pero en cambio apenas haya conversado con ERC y otros grupos al respecto, lo que "es un error".

La postura de este partido independentista ha llevado al secretario general de CCOO de Cataluña, Javier Pacheco, a lamentar el "circo político" y la polarización de las negociaciones de la reforma laboral, al tiempo que ha calificado de "error radical" el voto negativo de ERC y ha afirmado que la formación "no sabe de qué habla" en este asunto.

Precisamente, Pacheco acompañará mañana a Díaz en la asamblea de delegados de CCOO del sector servicios, ante la que la vicepresidenta explicará la nueva reforma laboral, lo que hará horas después de que, por la mañana, mantenga un encuentro con los principales cargos de UGT de Cataluña, incluido su secretario general, Camil Ros.

La reforma laboral es uno de los buques insignias de Díaz en esta legislatura y aprobarla con la participación de grupos de izquierdas de la periferia -ERC, pero también EH Bildu o el BNG, principalmente- podría reforzar eventuales aspiraciones de cara al futuro, cuando se la sitúa como potencial referente del espacio a la izquierda del PSOE.

Sin embargo, Díaz también corre el riesgo de que, ante la negativa de ERC y otras formaciones de izquierdas, sea Ciudadanos quien ofrezca sus votos para sacar adelante la reforma laboral, lo que diluiría su ambicionado perfil de izquierdas. EFE

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