Maputo, 3 feb (EFE).- Estados Unidos ha lanzado su tercer programa de entrenamiento militar en Mozambique para reforzar la capacidad de las tropas del país africano frente a la violencia yihadista que asola la provincia norteña de Cabo Delgado desde 2017.

"Como un socio estratégico Estados Unidos está comprometido a garantizar que los compromisos militares continúen durante un momento tan importante para la seguridad nacional de Mozambique", dijo el embajador estadounidense en el país, Dennis Walter Hearne, a través de un comunicado difundido este miércoles y recogido hoy por el periódico local O País.

Además de en el entrenamiento militar, la tercera misión enviada por el Departamento de Defensa de EE.UU. se centrará "en el derecho de los conflictos armados, los derechos humanos y el entrenamiento médico", señala el comunicado.

El Gobierno de Joe Biden envió su primera misión de Entrenamiento de Intercambio Combinado Conjunto (JCET, por sus siglas en inglés) en marzo de 2021, apenas dos semanas antes del brutal ataque yihadista ocurrido el 24 de ese mes en la ciudad costera de Palma, sede de millonarios proyectos gasísticos de la compañía francesa Total.

Ese ataque, perpetrado por el grupo yihadista Al Sunnah wa Jamaah (ASWJ), más conocido localmente como Al Shabab, fue el detonante para el envío de ayuda militar extranjera.

Tras el asalto, que desembocó en un asedio a la ciudad de varios días y causó decenas de muertos y unos 70.000 desplazados, los líderes de la Comunidad para el Desarrollo de África Meridional (SADC) aprobaron el envío de una misión militar conjunta para apoyar a Maputo.

La misión, conocida por las siglas SAMIM, se desplegó en julio de 2021 con una duración hasta el pasado 15 de octubre, pero ha sido ya prorrogada en dos ocasiones, la última en una cumbre extraordinaria del bloque regional de 16 países celebrada en Malaui este 12 de enero, donde no se estableció una fecha concreta para la retirada del dispositivo.

La SAMIM incluye tropas de Botsuana, Sudáfrica, Zimbabue, Angola, Malaui, Lesoto, Zambia, Tanzania o la República Democrática del Congo, como parte de una fuerza de intervención rápida concebida en un principio por la SADC como un contingente de unos 3.000 soldados.

Justo antes del despliegue de la SADC, Ruanda, que no pertenece al bloque, ya había enviado también a 1.000 soldados en apoyo al país.

La Unión Europea, por su lado, puso en marcha el pasado mes de noviembre una misión de formación militar EUTM Mozambique, prevista para extenderse durante dos años, y aprobó una ayuda de 40 millones de euros para las unidades militares mozambiqueñas entrenadas por la misión, que se suma a los cuatro millones de urgencia aprobados en julio.

Mientras las tropas ruandesas lograron recuperar el pasado 8 de agosto el control de la estratégica ciudad portuaria de Mocímboa da Praia, las fuerzas de la SAMIM abatieron en septiembre a un destacado líder religioso del grupo yihadista, Rajab Awadhi Ndanjile.

A pesar de estos y otros avances, se han registrado nuevos ataques durante este mes de enero en el distrito de Nangade (en el norte de Cabo Delgado) que han resultado en nuevas muertes de civiles.

Al Shabab - designado en 2021 como "organización terrorista internacional" afiliada al Estado Islámico (EI) y sin relación con el grupo homónimo somalí - ha causado más de 3700 muertos, entre ellos más de 1600 civiles, según el Proyecto de Datos de Ubicación y Eventos de Conflictos Armados (ACLED).

El conflicto también ha ocasionado el desplazamiento de casi 800.000 personas en Cabo Delgado, según la ONU. EFE

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