Adrian R. Huber

Madrid, 30 ene (EFE).- El español Ander Mirambell, que será olímpico por cuarta vez en los Juegos de Pekín 2022, explicó a EFE nada más llegar a la Villa Olímpica de las afueras de la capital china, que el viaje fue largo, "30 horas desde que" salió hacia China, pero que pudo "dormir siete u ocho" gracias a sus técnicas de auto-hipnosis; y que, de momento, lo que ha visto "tiene buena pinta".

"Acabo de volver ahora del gimnasio. La verdad es que el viaje ha tenido sus momentos. Yo tengo la suerte de que hemos trabajado el asunto del descanso; en su momento trabajé la hipnosis, también me gusta la auto-hipnosis. Es una técnica que hemos trabajado para descansar bien en los viajes; y de las diez horas (del vuelo largo) he dormido siete y media u ocho, más o menos. Yo creo que ha sido un buen viaje, pero se ha hecho duro porque, desde que salí de la habitación del hotel en Madrid (voló vía Frankfurt -Alemania- , donde se encontró con el resto de los españoles que viajaron) hasta que llegué a la habitación de la Villa Olímpica, han pasado treinta horas", explicó, en conversación telefónica con Efe desde China, el piloto de skeleton barcelonés.

"El viaje fue más o menos bien, aunque con muchas medidas de covid, que son un rollo. Y sobre todo la parte más dura ha sido cuando hemos aterrizado en China. Al salir del avión ya nos han hecho una PCR; y hasta que hemos llegado han pasado cinco horas", comentó.

"Rellenas todos los formularios, que ha ido bastante bien. Los repasan; activas la acreditación y luego hay que recoger las maletas. Después, hora y media de autobús hasta la segunda Villa, en la que estoy yo. Y luego es un poco desastre, porque somos de los primeros en llegar y los voluntarios aún no tienen por la mano dónde están todas las cosas y los sitios en esta Villa", explicó a Efe Mirambell, de 38 años, que se desplazó primero desde Barcelona a Madrid, donde, antes de partir hacia China, se entrenó dos días, recogió su ropa y organizó todo lo necesario para el viaje.

"Luego, se nota que tienen otra cultura; si les propones ir por otro sitio, tienen que consultar primero si se puede ir por allí, antes de hacerlo. No puedes tener tu iniciativa, porque ellos tienen que seguir las reglas que les marcan y al final tienen que consultar todo, lo que hace que todo acabe siendo más lento", apuntó.

"Un ejemplo bueno es que hemos llegado, hemos dejado las maletas fuera, en la puerta; hemos hecho el 'check in' y, una vez efectuado el mismo, nos han aislado en una habitación hasta tener el resultado del PCR; y las maletas se han quedado fuera. Lo lógico es que te dejaran entrar con tu maleta, pero eso no fue así. Se quedó un voluntario chino vigilando las maletas", indicó Mirambell.

"Son cosas curiosas del país, a las que te tienes que adaptar; y tienes que tener mucha paciencia", declaró el deportista de la Real Federación Española de Deportes de Hielo (RFEDH), que preside Frank González y que en los Juegos de PyeongChang (Corea del Sur), hace cuatro años, festejó el bronce olímpico del patinador artístico madrileño Javier Fernández, ya retirado.

"La Villa me gusta; el gimnasio está bien; con muchas medidas de seguridad. Mañana al despertarnos tendremos que hacer otro test, rellenar cosas en una aplicación... nos miran la temperatura en muchos sitios, que es de lo que más me ha sorprendido. En el avión nos han medido la temperatura cada tres horas; te despertaba un tipo con una linterna si te habías quedado dormido... le enseñabas la muñeca y ya", añadió, entre risas, Mirambell.

"Tiene todo muy buena pinta. En el gimnasio, eso sí, entre las cintas de correr hay mamparas... me queda ir al comedor, que aún no he ido, pero será lo de siempre, creo", dijo.

"Hay una sala como de realidad virtual a la que aún no he podido ir, pero que tiene buena pinta; una pequeña cafetería, una tienda de 'merchandising'... una peluquería, que me ha sorprendido, también: y bueno, otra cosa que me ha parecido interesante es que, como estamos a diez bajo cero o así, todo está conectado bajo tierra", explicó a Efe el cuádruple olímpico barcelonés, que empezará con los entrenamientos oficiales en el Centro Nacional de Deslizamientos de Yanqing el día 7; y competirá en ese mismo escenario las jornadas del 10 y del 11.

"Hay un párking y a través de él puedes llegar a otros edificios; porque el gimnasio, por ejemplo, está tres bloques más allá; y pude utilizar el pasillo interno, no tienes que ir por fuera", apuntó.

"Ya tengo ganas de coger la cama; ahora aún no son las siete de la tarde e intentaré echarme sobre las nueve, para no tener excesivos problemas con el 'jet-lag' ", comentó a Efe Mirambell después de llegar a su Villa Olímpica, donde residirá durante los Juegos de Pekín 2022. EFE

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